Mientras los observadores de lo qué pasa en América Latina tienen sus ojos pegado en el drama político tras el golpe en Honduras, se están dando pasos en Colombia hacia la liberación de varios prisioneros de guerra de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.

La senadora colombiana Piedad Córdoba garantizó esta semana estar dispuesta a recibir en el plazo de un mes de cuatro a cinco retenidos por las FARC, pero antes espera ser atendida por el presidente de ese país, Álvaro Uribe, para conversar la logística el proceso de liberación.

“Yo creo que se podría que el presidente nos permitiera avanzar en la liberación de los que ya anunciaron, del cabo Pablo Emilio Moncayo, del soldado Calvo, del compañero que está también en poder de las FARC”, retenido con Moncayo hace ya casi 12 años. “Yo creo que podríamos avanzar en un grupo de unos cuatro o cinco en poder de las FARC y avanzar hacia el intercambio”, anunció la senadora colombiana durante una conferencia de prensa que se llevó a cabo en Cúcuta al noroeste de Colombia, poco antes de asistir al acto de juramentación del grupo “Colombianos y Colombianas por la Paz” en el Norte de Santander.

Córdoba se encuentra a la espera de que el mandatario colombiano se reúna con ella para coordinar la logística de la liberación, pero Uribe dejó claro que será el Alto Comisionado para la paz, Frank Pearl, el dirija dicha operación.

“Entendamos que la agenda política del presidente está cargada de cosas”, aseguró Córdoba, quien la semana pasada fue autorizada por éste para que, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja y la Iglesia Católica, facilite la liberación.

En ese momento, Uribe condicionó la liberación, al exigir que fueran puestos en libertad los 24 policías y militares, así como la devolución de los cuerpos de tres uniformados que murieron en combate.

Durante su alocución, la senadora dijo que era muy difícil pensar que en un acto unilateral se puedan entregar a todas las personas. Bajo esta arista, resaltó el hecho de que se hayan dado los primeros pasos, que deja a las FARC con el interés de la entrega y al presidente Uribe dando el visto bueno a la mediación.

“No hemos tenido acercamientos con las FARC, pero tenemos conocimiento, por emisarios, que ellos insisten en la voluntad de entregar a las personas y el cadáver del mayor [Julián Ernesto] Guevara sigue en pie, pero hasta que tengamos la autorización del Gobierno no podemos hacer absolutamente nada, porque es asumir unos riesgos que son absolutamente innecesarios”, explicó.

La senadora anticipó que la solicitud más importante que le hará al presidente Uribe, como presidenta de “Colombianos y Colombianas por la Paz”, es que no es conveniente el “cuentagotas” ni de las FARC, ni del gobierno tampoco.

“En la medida que se avance en una postura clara con relación al intercambio, yo les garantizo al país que un mes tendremos a todo el mundo afuera”, precisó la mediadora ante las FARC.

Por otra parte, las cuentas de la parlamentaria presumen que entre los cinco liberados de forma unilateral estarían los dos ya ofrecidos por el grupo rebelde, el cabo Pablo Emilio Moncayo y el soldado Josué Daniel Calvo; más uno de los uniformados que se encuentran enfermos, entre los que estaría el subintendente de la Policía, Carlos José Duarte Rojas y Francisco Aldemar Franco Zamora, militar retenido en Miraflores. Los otros dos serían escogidos por las FARC.

La presidenta de la asociación que reúne a los familiares de los retenidos, ASFAMIPAZ, Marleny Orjuela solicitó al presidente Uribe que reciba cuanto antes a la senadora Piedad Córdoba, para establecer el procedimiento y garantías para la liberación.

Dijo que las FARC deberían dar a conocer los nombres de los cinco liberados, a fin de no crear falsas expectativas en las 23 familias que padecen la espera de sus seres queridos que permanecen en cautiverio.

Los familiares de los rehenes se reunieron este martes con el Comisionado de Paz, Frank Pearl.

Después que el presidente colombiano le diera luz verde para participar en la liberación de retenidos por las FARC, Córdoba anunció que la guerrilla está dispuesta a liberar, en primera instancia a cinco personas que se encuentran en cautiverio.

La liberación se daría en un término no mayor a un mes, siempre y cuando se produzca prontamente una reunión con Álvaro Uribe para hablar detalles sobre el tema.