Segunda de dos partes
Los abogados por los Cinco Cubanos también argumentan que la evidencia no es adecuada para sostener las acusaciones de conspiración para cometer espionaje, y hasta asesinato. Los cargos de conspiración para cometer el asesinato en el caso Hernández, que el fiscal trató de ligar con el derrumbamiento de dos aviones pertenecientes al grupo Hermanos al Rescate por parte de las Fuerzas Aéreas Cubanas el 24 de febrero de 1996 forma un precedente peligroso, ya que las acciones de un país soberano en defender a su territorio nacional nunca antes ha resultado en cargos criminales.
Otras cuestiones tienen que ver con sentencias excesivas, preparación no adecuada para una justa defensa, maltrato a los acusados y mal conducta de parte de la fiscalía, sobre todo en su argumento final. Finalmente, hay la cuestión de la “defensa por necesidad”, cuando, después de ver la evidencia de 31 documentos sobre la violencia perpetrada contra Cuba, el tribunal rehusó a admitir evidencias de ataques terroristas en la isla no solamente durante los últimos 44 años, pero ni siquiera durante el periodo limitado desde 1992 hasta la fecha.
Juntamente con esta apelación, se escuchará una moción buscando un nuevo juicio, presentada por el abogado por la defensa, Leonard Weinglass, el 13 de noviembre 2002. Esta moción es importante porque aumenta el expediente del tribunal, y también fortalece el argumento central sobre localidad. El juez Lenard, quien presidió sobre el primer juicio, rechazó a esta moción cuando fue presentada por primera vez ante el tribunal federal del distrito de Miami. Consecuentemente, se ha tardado desde mayo del año pasado para llegar hasta este punto en lo que ya se reconoce como una lucha prolongada por la justicia. Pero, como declaró recientemente Paul McKenna, abogado de Hernández, en una entrevista con Radio Habana Cuba, “Es como la novena entrada en béisbol. Estamos en la entrada final de este largo juego”.
El año 2004 será crítico en vista de los últimos gestos de Washington. Después de la expulsión de un diplomático cubano y la declaración del departamento de Estado que se iban a suspender pláticas sobre inmigración, Roger Noriega, secretario adjunto de Estado norteamericano para asuntos del hemisferio occidental, criticó a Cuba por “apoyar a elementos desestabilizadores dentro de varios países democráticos en América Latina”.
Ya que Noriega es amigo cercano de la “mafia de Miami,” y uno de los mayores responsables por la Ley Helms-Burton que penaliza a los que invierten en Cuba, esto no es ninguna sorpresa. Pero, señala a una creciente ofensiva contra Cuba en el periodo antes de las elecciones presidenciales de noviembre, en las cuales George W. Bush necesitará de nuevo la ayuda de sus amigos cada día más desesperados y beligerantes en Florida.
Los Cinco Cubanos y sus familias saben que esto no es el mejor momento para una audiencia propicia a su apelación, pero siguen comprometidos a la verdad y a la creencia que la justicia prevalecerá. Y más que eso, se fortalecen del hecho que la solidaridad está creciendo en fuerza a pesar de una conspiración de esconder a los hechos. Mientras EEUU busca a cualquier pretexto para justificar más agresiones contra Cuba en su guerra continua “contra el terror”, es más vital que nunca que se vindiquen a estos hombres, y que regresen a casa a sus familias. Ya que son los verdaderos luchadores contra un terrorismo que se dirige contra todos los que buscan un mundo más justo, igualitario y pacífico.
Como escribió uno de los presos, Antonio Guerrero, en el aniversario 45 del triunfo de la Revolución Cubana:
“Revolución que lleva en sus venas viriles la sangre emancipada de los Mambíes y el comienzo, sangre de sus palmeras, sangre de sus sierras, la sangre buena y dulce de toda esperanza. Revolución que camina sin parar, marchas tan poderosamente como una inundación, con su torrente de ideas, precisas y verdaderas, afrontando a la ofensa. Eres la voz visible de millones de gente. Eres la luz que guía, la trinchera invencible, el sueño hecho presente. Eres un corazón fraterno de la paz. ¡Feliz aniversario, Revolución eterna!”
Geoff Bottoms, párroco en Blackpool, Inglaterra, trabaja con la Campaña de Solidaridad con Cuba en el Reino Unido, y es presidente de su Grupo de Campaña por los Cinco de Miami. Ha visitado a Ramón Labañino y a Gerardo Hernández en prisión. Las autoridades norteamericanas todavía no lo han dejado visitar a los otros tres presos. Se puede comunicar con el autor al pww@pww.org.
Buscando justicia: El caso de los 5 cubanos