LOS ANGELES – Voceando “Salven el Rancho” y “Estas heridas no se curan” más de 150 activistas sindicales, comunitarios y discapacitados marcharon al frente del edificio administrativo del Hospital Rancho los Amigos reclamando que la ciudad no cierre este hospital tan importante y especializado.
“Vamos a estar aquí el tiempo que lleve, sin duda este es un caso de vida o muerte,” exclamaba Annelle Grajeda, administradora general del Local 660 del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios.
Grajeda hizo un llamado a cada uno para ingresar a la ciudad de casas de campañas instalada en las cercanías del hospital. Miembros de sindicatos, activistas de la comunidad y activistas discapacitados se han comprometido quedarse y no abandonar las casas de campañas hasta estar seguros de que no cerraran el hospital.
Miles de residentes del condado de Los Ángeles dependen de los servicios del hospital. Para muchos pacientes es realmente un caso de vida o muerte. Rancho es el único hospital al oeste del rio Mississippi que se especializa en tratamientos de heridas en la cabeza y la columna vertebral. La junta de supervisores del condado de Los Ángeles votaron por cerrar el hospital porque consideran que no hay presupuesto para mantenerlo abierto.
Luchan por salvar hospital