HOUSTON — Cuatro mujeres que trabajaban para KBR, antes conocida como Kellog Brown & Root, han puesto una demanda contra KBR y Halliburton, clamando que ellas fueron acosadas y, en dos casos, ultrajadas en el trabajo en Irak, informó el diario Houston Chronicle del 30 de junio. KBR es una subsidiaria de Halliburton, que es el mayor beneficiario de billones de dólares por impuestos como resultado de la guerra en Irak. El vicepresidente Dick Cheney es el antiguo ejecutivo principal de Halliburton.
Los abogados de las acusadoras dijeron que sus clientes fueron expuestas a “un ambiente sexualmente cargado donde las mujeres fueron repetidamente degradadas y solicitadas para tener sexo a pesar de divulgar el acoso a los supervisores”. Las mujeres fueron obligadas a dirigirse a los tribunales civiles ya que no pueden determinar si las autoridades federales están procediendo con el caso criminal.
Los expertos han dejado saber que muchos crímenes no se están procesando contra los contratistas civiles en la guerra porque no se ha determinado cual sistema judicial aplica a los civiles estadounidenses que trabajan en una zona de guerra en un país ocupado.
Los crímenes sexuales alegados fueron cometidos en 2004 y 2005. Una mujer de Conroe, suburbio de Houston, declara que necesitó cirugía para reparar músculos despedazados e implantes del ceno rotos después de que había sido narcotizada e ultrajada por compañeros del trabajo borrachos en Bagdad en 2005.
La demanda alega que hay un ambiente de trabajo que era permisivo a favor de los hombres, excusaba sus comportamientos abusivos y quizás los promovía.
Mujeres demandan a Halliburton por asalto sexual en Irak