El 11 de marzo, la congresista republicana Thelma Drake de Virginia sometió una petición para que el proyecto de ley SAVE, HR 4088, sea considerada directamente por la Cámara de Representantes, omitiendo su consideración en varias comisiones legislativas.
SAVE (por sus siglas en ingles, “Asegurar América por Medio de Verificación y Cumplimiento), cuyo patrocinador principal es el congresista demócrata por Carolina del Norte Heath Shuler, es una legislación netamente represiva, que al aprobarse causaría muchos problemas para obreros, tanto inmigrantes como no inmigrantes. Obligaría a todo patrón que averigue la situación migratoria de todos sus empleados por medio de un sistema electrónico del gobierno que ya se sabe contiene muchos errores. Obligaría también que todo patrón despida a cualquier empleadopor el cual recibe una carta “No Match” si aquel empleado no puede corregir la situación dentro de 10 días. Estas cartas le dicen al patrón que el nombre del empleado no corresponde al número de Seguro Social que dio.
La mayoría de los expertos dicen que hay millones de errores en los archivos de la Administración de Seguro Social, y de que una utilización tan férrea de dichos archivos como mecanismos para esforzar a las leyes migratorias, producirá el resultado de que muchos miles de ciudadanos norteamericanos pierdan sus trabajos. Hay una verdadera posibilidad de que el caos que esto podría causar, haga un daño a la economía.
Los motivos del liderazgo republicano en la Cámara de Representantes por querer forzar un voto sobre este proyecto de ley son varios. Obviamente siendo éste un año de elecciones, hay cierta demagogia de por medio. El juego de usar a los inmigrantes latinos como chivos expiatorios por los problemas económicos y sociales causados o intensificados por la política del presidente Bush.
También, este mes, un tribunal federal oirá argumentos en una demanda en contra del gobierno federal por la federación sindical AFL-CIO y otros, que cuestiona el uso de las cartas No Match como mecanismo de poner en fuerza las leyes de inmigración, pues en los estados nacionales tal uso de los archivos de Seguro Social carecen de autorización alguna. Aprobar al proyecto de ley SAVE puede verse como una autorización legal para esas acciones.
Los lideres republicanos están recurriendo al uso de una petición especial, pues, como ellos se quejan, la directiva de la mayoría demócrata en la Cámara de Representes mantiene el proyecto estancado en varias comisiones. Si los republicanos obtienen 218 firmas en su petición, pueden sacar el proyecto del proceso en el cual primero se considera la propuesta ley en comisiones y va directamente al pleno. cosa que aumentaría a la posibilidad de que la sea aprobada.
Es probable que la gran mayoría de los republicanos en la cámara baja firmen la petición. 48 demócratas también se han apuntado patrocinando a SAVE, y por lo tanto es posible que suficientes demócratas firmen la petición para que salga adelante. La presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, ha estado trabajando fuertemente para que esto no suceda, y a la fecha solo unos cuantos demócratas han firmado.
Organizaciones sindicales y pro derechos de los inmigrantes están pidiendo que el publico tome acción inmediata para parar a la ley SAVE, HR 40888. El primer paso es de parar en frío la “petición” y por eso están pidiendo a gente que se pongan en contacto con sus congresista para o que no firmen la petición o, si ya la han firmado, que quiten su nombre.
Nuevo empuje en favor de ley contra inmigrantes