FILADELFIA — “¡Felicidades, jóvenes, están por convertirse en miembros de sindicatos!”
Con estas palabras de James Nevels, presidente de la Comisión de Reforma Escolar, anunció el acuerdo potencialmente inovativo entre dicha comisión y el Concilio de Sindicatos de la Construcción, por medio del cual se ofrecerán 425 plazos de aprendiz para graduados de las escuelas de Filadelfia durante los próximos cuatro años. Esto podría significar que una gran proporción del plan ambicioso del distrito escolar de construir y renovar inmóviles podría hacerse por mano de obra sindicalizada y derivada de los graduados de las escuelas publicas.
El acuerdo fue aplaudido por funcionarios escolares, sindicales y del gobierno, pero elaborar los detalles no fue un proceso ni fácil ni rápido. Pat Gillespie, jefe del Concilio de Sindicatos de Construcción, dijo a Nuestro Mundo que la idea empezó con un líder del sindicato de profesores (PFT) hace una década. Dijo que en el pasado, los sindicatos de la construcción se habían sentido que los estudios académicos competían con sus sindicatos, y de que los empleos manuales altamente capacitados no eran vistos como opciones viables para los estudiantes, por el distrito dscolar. Opinó de que con el nuevo pacto, el distrito escolar ha reconocido la necesidad de cambiar esa forma de pensar. “Tenemos un grupo de coordinadores que elaboran los planes de estudios para los programas de aprendiz. Dicen, y es verdad, que necesitamos personas que han aprendido como aprender. En la industria de la construcción, las cosas siempre están cambiando”.
Janet Ryder de la AFL-CIO, una ex profesora y dirigente del PFT, agregó que ella y otras estaban entusiásticamente anticipando este acuerdo por años . Ella le dijo a Nuestro Mundo que el distrito escolar iba a hacer lo que le corresponde para asegurar que el pacto alcance a su máximo potencial, y que las “tremendas desigualdades” de raza y sexo que por mucho tiempo han bloqueado a los graduados de las escuelas públicas de Filadelfia, sean superadas. Por ejemplo, dijo, “si a usted le han lavado el cerebro para creer que las muchachas no pueden avanzar tanto como los muchachos en ciertos oficios, ¿entonces porque intentarlo?”.
Larry Aniloff, director ejecutivo del programa de carreras y tecnología para el distrito escolar, un antiguo profesor de negocios y jefe de su departamento, le dijo a Nuestro Mundo que “este acuerdo es algo que hemos estado contemplando por mucho tiempo”, de que por su parte, el distrito se compromete a que sea exitoso. Dijo que a lo mejor el modelo del programa será un programa que ya existe con el sindicato de vidrieros, por medio del cual estudiantes actuales de secundaria pueden empezar a cumplir con los requisitos de aprendiz en la escuela y en el verano. La mayoría de los alumnos que van a calificar para estos plazos vendrán de los 6 escuelas secundarias en el distrito que se enfocan en programas de carreras y tecnología, pero a los alumnos de otras secundarias en los vecindarios también les extienden la invitación. Dijo que el distrito escolar va a trabajar con el gobierno municipal y otras agencias para dar publicidad a esta oportunidad, reclutar estudiantes y asegurar el éxito de los que entran.
Aunque el número de participantes, con un promedio de 60 o 65 alumnos, no son grandes, comparándolo con los 12.000 que se gradúan de secundaria en Filadelfia cada año, este pacto puede señalar el comienzo de algo grande. Como lo explicó Gillespie, podría cubrir entre 50 por ciento y 100 por ciento de los plazos de aprendiz creados por la ciudad durante cuatro años. Hizo constar que esto aumentará en forma significativa la diversidad racial de la mano de obra en la construcción en esta ciudad, diciendo, “la composición racial de la mano de obra debe reflejar la de la comunidad”.
Este pacto también es una noticia buena en un distrito escolar grande que, después de cinco años de poder aumentar lo que se gasta por alumno, una vez mas se encara con recortes presupuestarios y de personal.
Nuevo programa promete abrir puertas para estudiantes urbanos