Los sindicatos progresistas de las Américas agrupados en la Federación Sindical Mundial se solidarizó con el pueblo venezolano en su lucha contra la corporación multinacional petrolera Exxon-Mobil.
La Secretaría América de la Federación Sindical Mundial condenó las medidas judiciales iniciadas por la transnacional Exxon Mobil contra Petróleos de Venezuela (PDVSA) y apoya la posición del Estado de esta nación.
La corporación petrolera está disputando el pago recibido por Venezuela tras una ley venezolano que estipula que 60 por ciento de estas propiedades en ese país venezolano será controlado por PDVSA. Esta ley es parte de las medidas establecidas por el gobierno del presidente Hugo Chávez para controlar los recursos naturales para el beneficio del pueblo.
El tribunal internacional, que tiene lazos con el Banco Mundial, ordenó la congelación de propiedades de PDVSA valoradas a $12 mil millones, la cantidad que Exxon-Mobil dice que se le debe.
El gobierno de Venezuela está usando las ganancias del petróleo para la educación, salud y bienestar general del pueblo venezolano, empezando con los más pobre. Venezuela también ha ayudado a los necesitados en otros países proveyendo combustible al costo a través de las propiedades de PDVSA en esos países.
En la declaración de los sindicalistas, transmitida desde La Habana, se llama a todas las organizaciones afiliadas, amigas y progresistas a solidarizarse con los trabajadores y pueblo venezolano y a exigir su respeto a la total independencia.
Ramón Cardona Nuevo, Secretario de la FSM para América, denunció la ingerencia política y económica de Estados Unidos en Venezuela y su intento de desabastecer a éste país de productos básico para asfixiar al pueblo.
Cardona señaló que el objetivo de la Exxon Mobil es desatar una guerra económica contra Venezuela con el fin crear el descontento y desorden entre los habitantes para derrocar al gobierno de Hugo Chávez.
Los movimientos progresistas y clasitas del orbe conocen, expresó la FSM, que detrás de las acciones de la transnacional petrolera norteamericana, está el gobierno de Estados Unidos que es capaz de sustituir las sanciones por bombas y misiles para preservar la soberanía en el área.
La Federación Sindical Mundial en América destacó en la denuncia, que la Venezuela de hoy representa a la conciencia latinoamericana independentista, frente a las ambiciones de las transnacionales cuyas políticas neoliberales persiguen la privatización y el dominio de los recursos naturales de los pueblos.
Organización obrera se solidariza con Venezuela en contra de Exxon-Mobil