Jóvenes se manifiestan pacíficamente en Atenas, Grecia el 9 de diciembre por la matanza de Alexandros Grigoropoulos, un joven de 15 años, por la policía. Como respuesta popular hubieron días de disturbios y motines en varias ciudades del país. En Atenas la policía lanzó gas lacrimógeno en contra de cientos de jóvenes que lanzaban piedras. En Tesalónica, jóvenes atacaron a una comisaría de policía cerca de la universidad. También hubieron disturbios en Komontini, Ionannina y Creta. El Partido Comunista y la Juventud Comunista de Grecia publicaron un comunicado en contra del asesinato. “Condenamos el asesinato a sangre fría... Este incidente es resultado de la educación y orientación de las fuerzas de seguridad que son dirigidas contra el pueblo, contra el movimiento popular y obrero, contra la lucha de la juventud”, dice la declaración comunista. Los comunistas dijeron que el asesinato del joven Grigoropulos es parte de un patrón de palizas a inmigrantes, estudiantes y obreros que esconde el gobierno. El gobierno se vio forzado a cerrar las escuelas públicas y las universidades debido a las protestas. A la hora de prensa, los sindicatos anunciaron que iba a lanzarse a una huelga general en contra del gobierno.
Protestan asesino de joven en Grecia