Protestan intervención EEUU en Venezuela

CARACAS (VenezuelaAnalysis.com) – Las calles de Caracas eran un mar de rojo el domingo, 29 de febrero, cuando miles de partidarios del presidente Hugo Chávez salieron a las calles para mostrar su coraje contra la intervención de Estados Unidos en los asuntos venezolanos. Documentos recién desclasificados demuestran evidencia que millones de dólares del gobierno estadounidense fueron a sectores de la oposición venezolana. Después de que el presidente Chávez anunció el descubrimiento de este apoyo substancial para la oposición hace dos semanas en su programa dominical Aló Presidente, los venezolanos han estado furiosos, demandando que EEUU deje de intervenir en los asuntos domésticos venezolanos.

El presidente Chávez se dirigió a cientos de miles de sus partidarios la tarde del domingo, insistiendo en que la administración Bush respete a la democracia venezolana y a su presidencia. Chávez dijo que Bush estaba en la Casa Blanca como resultado del fraude electoral y no es el legítimo presidente porque se robó las elecciones. El líder venezolano animó a sus constituyentes que respeten a la gente de EEUU y le pidió a los ciudadanos estadounidenses que exija que su gobierno respete a las vecinas naciones y pueblos de las Américas.

Chávez habló directamente de la relación importante que Venezuela comparte con EEUU, económicamente y social, y señaló específicamente los intereses claves e inversiones que Venezuela tiene en EEUU que incluye a ocho refinerías que emplean a miles de norteamericanos.

Las acusaciones de Chávez fueron inspiradas por los documentos hecho público por el Comité de Solidaridad con Venezuela, una organización estadounidense sin fines de lucro, que proveyó evidencia sólida de los millones otorgado por el departamento de Estado norteamericano a la National Endowment for Democracy para proyectos relacionado con Venezuela. Los documentos, obtenidos por la Ley Libertad de Información en EEUU, le da a Chávez la prueba de participación norteamericana en el golpe de estado contra su gobierno en abril del 2002, y la continua campaña de desestabilización. La semana anterior Chávez culpó a Bush por los resultados del atentado que falló.

La marcha tomó lugar después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció que las 1,4 millones de firmas obtenidas por la oposición en noviembre 2003 en busca de la destitución del mandato de Chávez será revisada para ver si se hizo fraude. Si encuentran que las firmas son inválidas, la oposición no habrá conseguido las 2,4 millones de firmas necesarias para un referendum de destitución. Muchos líderes de la oposición anunciaron que si las firmas son rechazadas por el CNE recurrirán a otros métodos para remover a Chávez de su puesto al cual fue democráticamente elegido.

La oposición hizo unas pequeñas manifestaciones el viernes y el sábado anterior en donde dos personas fueron muertas y docenas heridas por pelear entre sí. Varias docenas de grupos opositores también se enfrentaron con los partidarios de Chávez y miembros de la Guardia Nacional durante la marcha del domingo. En un caso los opositores reunidos en la sección Altamira de Caracas empezaron a disparar contra la Guardia Nacional e hirieron a Felipe Izquierdo, un camarógrafo de Univisión, y a Juan Barreto, un fotógrafo de la agencia noticiosa francés, AFP. La bala le dio al fotógrafo en el pecho, pero dichosamente tenía puesto un chaleco a prueba de bala. Ambos están en condición estable.