(Escrito el 12 de septiembre 2008)
LA HABANA — Cuba ha sido, y sigue siendo, devastado por el Huracán Ike.
Lo único, y sin lugar a dudas lo más importante, que no ha sido devastado es la voluntad y determinación del pueblo cubano de superar al desastre y seguir adelante.
Hay mucha información en circulación en la prensa internacional sobre la intensidad de los daños. Pero tal vez hay una que otra cosa que no se ha escrito, y quisiera mencionarlos brevemente.
Ni una provincia se quedó sin sentir los efectos. Hay más o menos destrucción de una provincia u otra, pero todas 14 provincias y el municipio especial de Isla de la Juventud han sufrido bajo el impacto del Huracán Ike. Y algunas provincias han tenido que aguantar un impacto doble, especialmente Pinar del Río que todavía en el momento en que escribo estas palabras queda bajo una “alarma ciclónica” debido a las intensas lluvias y tormentas tropicales que siguen afectando a la provincia. Todos los 14 municipios de la provincia están sufriendo, pero los dos municipios de Los Palacios en el sur y Las Palmas en el norte han absorbido lo más fuerte del impacto tanto del Huracán Gustav como Ike.
El ojo de Ike salió de Cuba pero su cuerpo sigue fuerte con vientos de hasta 150 kilómetros por hora — todavía categoría 1 pero categoría 2 empieza con 154 kilómetros por hora. En La Habana todavía tenemos rachas de hasta 80 kph. Todas las zonas costales en el oeste de la isla han sido evacuadas por razón de las inundaciones. Por ejemplo anoche las aguas del océano penetraron dos kilómetros tierra adentro en a región de Batabano, en el centro de la costa sur de la Provincia La Habana.
A partir de las 4:30 ayer, sitios con más de 2,5 millones de personas, o sea casi 21 por ciento de la población nacional de unos 12 millones fueron evacuados. Y el número crece paulatinamente, como varios ríos que jamás en la historia se han inundado sobrepasan sus orillas por razones de los aguaceros, mientras que presas llenas contribuyen aun más a las inundaciones.
¡Dos millones y medio de gente! En los 17 años en que yo he vivido en Cuba, incluyendo durante muchos huracanes, no me acuerdo de que se haya evacuado tantos sitios con tantas personas. Es una operación inmensa que requiere organización, coordinación y cooperación.
Es importante notar que más de 2 millones de personas pudieron tener acceso a albergues en las casas de parientes o amigos, lo que es otra indicación más de la solidaridad increíble que funciona todos los días en la sociedad cubana.
El daño a las cosechas tanto para consumo doméstico como para exportación, es extensivo. En Villa Clara, unos 70 por ciento de los plátanos de todos tipos han sido aplastados, y el maíz, papaya y yuca también ha sido afectado.
En Holguín, el plátano, yuca, vegetales y frijoles fueron seriamente afectados. En Santiago de Cuba, los daños a plátano, yuca, maíz y caña de azúcar, es muy serio. Mucho café ha caído de los árboles, pero si el tiempo permite, van a tratar de salvar lo que se pueda.
En Ciego de Ávila, donde se produce plátanos para la sociedad entera, esta cosecha y otras han sido seriamente dañadas.
En Cienfuegos, se ha afectado al plátano como también a la batata, al igual a los vegetales y los cítricos como toronjas y naranjas. Lo único que no fue afectado es la malanga, una raíz parecida a las papas. También están intentando rescatar al café caído de los árboles en la sierra del Escambray. Lo mismo pasa en Baracoa y Maisi, ambos en la provincia de Guantánamo, que son las zonas principales donde se produce el café.
Por dondequiera la vivienda queda seriamente afectada. Reportes preliminares de Holguín indican que más de 150.000 viviendas han sido afectadas, de las cuales 37.000 han sido totalmente destrozadas. La provincia de Las Tunas dice que nada parecido a Ike los han azotados en la provincia en 50 años. En algunos municipios, 80 por ciento de las viviendas fueron afectadas. No puedo ni estimar cuantas cientos de miles de casas han sido dañadas o destruidas en todo el país. Los números finales han de ser bastante elevados.
¡Y los aguaceros! Eso es lo más serio de Ike ahora, aun más que los vientos. En el Escambray, más de 500 milímetros de lluvia ha caído en algunas zonas. Algunas comunidades todavía se encuentran sin poder comunicarse con el resto del país debido a árboles caídos que están bloqueando las carreteras. Pero antes de la llegada de Ike, personal experimentada, incluyendo especialistas de salud, fueron enviadas a estas comunidades en las montañas, además de más alimento, en anticipación de tales problemas, ya como el Huracán Fay, antes del Huracán Gustav, ya había afectado a las redes eléctricas en el Escambray.
La hermosa zona de Las Terrazas, en Pinar del Río, donde sin duda muchos de ustedes han ido de visita, recibió más de 400 milímetros de lluvia en las últimas 24 horas, como ha sucedido también en muchas otras zonas de la provincia, y otros sitios en el país. Pinar queda totalmente sin servicio eléctrico. Vinales y otras zonas se encuentran sin poder comunicar con el mundo exterior. Al impacto de Gustav ya se agrega el impacto de Ike. Algunas personas en Pinar del Río hasta están preguntando si va a regresar Ike, ya como no tienen comunicación ni acceso a información, y les parece que ya está lloviendo más que nunca.
Por dondequiera en el país, las presas se encuentran rellenas de agua, lo que causa inundaciones todavía en los bajíos, de donde toda la gente ha salido. En Las Tunas, antes del pasaje de Ike, la provincia había estado aguantando una sequía con las presas llenas solo a la mitad de su capacidad. Ahora todas las presas se están derramando. La presa Búlgara en Camaguey, construida hace 22 años, jamás se ha llenado completamente en el pasado, pero ahora, desde Ike, está completamente llena y el agua está derramando.
También por primera vez desde su construcción, la autopista central de Cuba se ha inundado.
Una noticia muy buena entre las malas: Las casas “más a prueba de huracanes” que fueron construidas para reemplazar a las que fueron destruidas por el Huracán Dennis en 2005, pudieron resistir a Ike.
A José Rubiera, el jefe del departamento cubano de meteorología, le preguntaron si en la historia Cuba ha tenido un huracán que ha tocado a todas regiones del país como lo ha hecho Ike. Respondió que el Huracán Dennis entró por Granma y luego pasó por todo el centro de Cuba, pero que la región oriental de Cuba jamás ha tenido un huracán tan fuerte como este.
Viene ayuda de todos lados, dentro y fuera del país. Ejemplos: Santiago de Cuba ha enviado brigadas de socorro a Baracoa y Holguín. Camaguey, que tiene brigadas en Pinar del Río que se dirigieron hasta ahí después de Gustav, les ha dicho a esas brigadas que permanecen donde están para seguir ayudando con la reconstrucción en aquella provincia hermana. Camaguey, que ha pasado por lo menos 25 años sin ver un huracán de tanta fuerza y donde dicen que no tienen la misma experiencia con estas cosas como tiene Pinar, sin embargo ha extendido su mano de solidaridad a los pinareños.
Y desde el extranjero: Ustedes ya saben acerca de la ayuda rusa — alimentos, enormes tiendas de campo, materiales de construcción. Y $500,000 desde el pequeño y muy pobre país de Timor Oriental. México está ofreciendo ayuda con viviendas y electricidad. Uruguay ha emitido un llamado la comunidad internacional a que ayude a Cuba con comida, medicamentos y materiales de construcción. Brasil está juntando un grupo interministerial de auxilio para ayudar a Cuba y Haití. Después de Gustav, la solidaridad y ofertas de ayuda ya llegaban de China, Venezuela, Bolivia, Argentina, España, Brasil, México, Guatemala, las Islas Caimanes, el Perú, Santa Lucia y otros países.
Cuba tiene la voluntad y determinación, pero va a necesitar bastante ayuda material para poderse reconstruir. Hoy noche, en el programa de televisión Mesa Redonda, vamos a recibir más información sobre lo peor del daño en distintas zonas del país. La información todavía es preliminar, ya que tantas áreas están fuera de comunicación.
Empecé esta carta electrónica a las 1:30 de la tarde, ya son las 4. A las 1:30 por fin se pudo restaurar el servicio electrónico en mi vecindario. Pero muchas zonas de la ciudad no lo tienen todavía. Calle 23, la calle principal en Vedado tiene muchas ramas caídas de los árboles y aun más alambres eléctricos arrojados al suelo. Todavía hay bastante viento. Es demasiado peligroso para que los electricistas vayan a hacer las reparaciones, de modo que será un tiempecito antes de que se restaure todo. Luego, a las 2:30, solo una hora para que mi refrigerador se enfriara para que la comida no se echara a perder, empezó otra tremenda tormenta, con relámpagos y truenos muy fuertes. Tuve que apagar mi computadora por razón de que el ángulo de la lluvia causaba que agua entrara por mi ventana. Mis dos gatitos, Mariposa y Luisito, se asustaron mucho. Ya se apagó la luz otra vez y por eso estoy terminando esta comunicación y la estoy enviando con la batería. Una vez mas, no se cuando podré enviar la próxima. Pero es importante que ustedes sepan que aunque ya se fue el “ojo” de Ike, todavía nos azotan bastante viento y lluvia. ¡Que cosa inmensa!
Una cosa que el Huracán Ike ha ocultado, y que es importante que le demos publicidad, son los Juegos Paralympicos en Beijing. ¡Cuba está triunfando! A la fecha: 4 de oro, dos de plata y 4 de bronce. Y Cuba ha establecido nuevos records, por ejemplo en la carrera de 100 metros de mujeres, y en 400 metros para hombres. Y cuando les preguntaron a estos impresionantes jóvenes, a quien querían dedicar sus medallas, respondieron “A Fidel, a Raúl, a mi madre, a mi familia, al pueblo de Cuba que está luchando valientemente con el huracán”.
Testigo de los huracanes en Cuba