Para principios de marzo la Comisión Judicial del Senado tomará la cuestión de “reforma migratoria”. El republicano Arlen Specter, presidente de la comisión, hizo un resumen de las cosas que él quiere que se consideren. Entre estos están medidas de control de inmigración y un programa de trabajadores huéspedes. La legalización para los indocumentados tenía menos énfasis.

Además, habrá presión por la ultraderecha para medidas más represivas como las que contiene el proyecto HR 4437 que pasó la Cámara en diciembre.

Bush y las grandes empresas quieren un nuevo programa de trabajadores huéspedes. Algunas de las fuerzas que luchan por la legalización total, incluyendo unos sindicatos y grupos de derechos del inmigrante, apoyan al proyecto McCain-Kennedy (S 1003 y HR 2330) que, aunque proveen por la legalización, incluyen un programa de trabajadores huéspedes. Muchos ven a esto como un mal necesario para conseguir los votos republicanos para un proyecto que incluya la legalización. La AFL-CIO, aunque apoya a la legalización, no apoya al McCain-Kennedy debido al plan de trabajadores huéspedes.

Tenemos que luchar contra las medidas represiva y por la legalización “con una vía clara a la ciudadanía” para los indocumentados. Tenemos que trabajar contra la idea de trabajadores huéspedes, y si no se puede parar, buscar medidas para proteger a los derechos de los trabajadores.

La idea que un programa de trabajadores huéspedes pondrá fin a la inmigración no documentada es una mentira. La migración indocumentada es forzada por la creciente brecha entre los países ricos y pobres y entre los mismo ricos y pobres en los países de origen de los mismos inmigrantes. Esta situación sale de la política de comercio libre, la privatización y los programas de austeridad que la administración Bush y la clase dominante estadounidense, junto el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial del Comercio con los que obligan a los países pobre cumplir.

Todos los trabajadores huéspedes deben tener fácil acceso a la residencia permanente sin depender de la voluntad del patrón.

Las visas de trabajadores huéspedes deben poder ser transferible de un empleo a otro, con tiempo razonable entre empleo. Estos trabajadores deben ser elegible para beneficios de desempleo y por enfermedad o heridas en el trabajo y pagar al Seguro Social y Medicare.

Todo trabajador huésped debe tener el derecho de traer a sus familias con ellos, o empezar familias aquí, y participar completamente en la vida de la comunidad sin restricciones o discriminación. Viviendas de alta calidad especial, junto con programas de salud y educación para los trabajadores huéspedes deben de ser pagado por los patronos.

Los trabajadores huéspedes y sus familias deben ser permitido entrar y salir de sus países de origen y Estados Unidos, sin restricciones.

Todas las leyes laborales estadounidenses deben ser aplicable a los trabajadores huéspedes y monitoreada para asegurar que se cumplan. Los trabajadores huéspedes deben tener acceso a todos los remedios legales contra los patrones que son disponible a todos los otros trabajadores.

Los sindicatos estadounidenses tienen que tener acceso completo y confidencial a todos los trabajadores huéspedes, desde que antes los trabajadores salgan de sus países de origen. Las declaraciones de que los trabajadores huéspedes tendrán “derechos laborales” no significa tanto. Los mineros del carbón murieron en Virginia Occidental es muestra de que las “garantías laborales” no significa tanto si uno no tiene un sindicato que los respalda y defienda con la amenaza de hacer una huelga.

Todos los derechos civiles deber ser garantizados a los trabajadores huéspedes.

Los trabajadores huéspedes deben tener acceso total a los tribunales, y no solo los de inmigración, para bregar con asuntos en cuestión a sus situación en el país, el trabajo, y en la comunidad.

Las empresas que buscan contratar a los trabajadores huéspedes deben anunciar por trabajadores en EEUU con salarios que corresponden a las “normas salariales”, mientras que se sube el salario mínimo, especialmente en la agricultura.

Ningún patrón con una disputa laboral activa, o con un historial pobre de relaciones laborales-gerenciales o falta de cumplir con las leyes laborales, no se debe permitir participar en ningún programa de trabajadores huéspedes.

Las empresas dirán que esto minará las razones de tal programa si se le da a los trabajadores huéspedes los mismos derechos que otros trabajadores. Pero ellos nos dicen que la razón que necesitan estos trabajadores es porque no encuentran trabajadores en EEUU que hagan el trabajo, y no porque necesitan trabajadores con menos derechos.