Declaración de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad
Horas antes de dar inicio a una consulta popular que decidiría sobre la instalación de una cuarta urna en las elecciones del próximo 29 de noviembre, en la que se determinaría la posibilidad de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente en la República de Honduras; un Golpe de Estado orquestado por una pequeña cúpula de las fuerzas armadas del país, apoyada por la extrema derecha burguesa y las empresas de medios de comunicación, ha vulnerado la democracia latinoamericana y la potestad del pueblo hondureño de decidir sobre sus asuntos internos.
Siguiendo la moderna receta imperialista para llevar a cabo Golpes de Estado, un grupo de militares sublevados secuestraron durante la madrugada de este domingo al presidente legítimo de la república Manuel Zelaya, obligándolo por la vía de las armas a abandonar el territorio hondureño, apoyados por un cerco mediático que impide al pueblo conocer los hechos que se desarrollan. A esto se suman los cortes en el suministro eléctrico, la interrupción de las señales de los medios estadales y las denuncias de violación de derechos humanos a ciudadanos hondureños, funcionarios gubernamentales y diplomáticos extranjeros acreditados en el país, por parte del gobierno de facto.
La Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad condena el Golpe de Estado en contra del presidente constitucional de la República de Honduras, Manuel Zelaya y repudia cualquier ataque en contra de la dignidad de la nación hondureña. Nos solidarizamos con el espíritu democrático del hermano país centroamericano, reiterando nuestro compromiso con la libre determinación de los pueblos y exigiendo el respeto a las instituciones legítimamente constituidas.
Exigimos el cese de las agresiones y acusamos públicamente a los militares golpistas que usan las armas en contra del pueblo, denunciando a los medios de comunicación cómplices que desvirtuando su labor, se apegan a los intereses hegemónicos.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional, a los movimientos sociales y a los pueblos del mundo a condenar y manifestarse masivamente en contra del Golpe de Estado, exigiendo el retorno de la legalidad y la institucionalidad en Honduras. Así mismo, desconocemos cualquier gobierno que pretenda instaurarse en el poder por la fuerza, convocando al pueblo hondureño a resistir contra el fascismo y la burguesía reaccionaria y conservadora, hasta tanto sea restituida la democracia.
Un golpe para callar al pueblo hondureño