Traducido por: Jacques LaPere
Nota del Editor: A continuación se hallan dos declaraciones emitidas por el Sr. Richard Trumka, Presidente de la AFL-CIO: la primera, del 22 de mayo, en reconocimiento del voto del Comité Jurídico del Senado de 13-5 para someter la propuesta inmigratoria a la consideración del Senado. La segunda, del 21 de mayo, revela las razones por las cuales la federacón laboral se opone a las enmiendas sugeridas por el Sr. Orin Hatch, Senador Republicano, sobre la otorgación de visas H1-B para trabajadores con habilidades avanzadas.
Hoy nos hace recordar las palabras sabias y llenas de esperanza que pronunció el Dr. Martin Luther King, "El arco del universo moral es largo, pero se inclina hacia la justicia".
Hoy, más de 11 millones de personas, deseosos de ser estadounidenses, tomaron el paso agigantado hacia esta meta debido al voto del Comité Jurídico del Senado, compuesto de miembros de los dos partidos principales. Esto representa un paso importante hacia rectificar una injusticia, o sea, la crisis de deportación que hace demasiado tiempo ya ha venido arruinando a familias, destrozando a comunidades y a los lugares de trabajo.
El próximo paso, por supuesto, es no permitir que este logro nos conduzca a la complacencia, sino redoblar la campaña encabezada por la fuerza laboral para la creación de un sendero hacia la ciudadanía. Esto va a involucrar todo tipo de esfuerzo, desde la presión política a la antigua por medio de cabilderos hasta los nuevos medios sociales en colaboración con nuestros aliados nuevos y los de siempre.
Apreciamos el trabajo realizado por la Pandilla de los Ocho, así como el de todos los senadores - tanto Demócratas como Republicanos - quienes colaboraron de buena fe en el arduo trabajo de hacer que saliera adelante esta propuesta de ley. Mientras aplaudimos el avance realizado por el Comité Jurídico, vamos a trabajar para hacer de lo que es una buena propuesta, una que será todavía mejor. Vamos a seguir insistiendo en enmiendas afirmativas siempre donde sean necesarias - ya sea en cuanto a la reunificación de familias, visas para trabajadores con habilidades avanzadas [ver declaración abajo], protecciones para los trabajadores, o el Acta para la Reunificación Familiar.
A fin de cuentas, lo que buscamos sigue siendo lo de siempre: un sendero de fiar e inclusivo hacia la ciudadanía para todos nuestros hermanos y hermanas que ya son estadounidenses en todo sentido de la palabra excepto sobre el papel. Al votar, el Comité Jurídico del Senado ha mostrado su buena voluntad de asegurar esta meta minima y anticipamos ayudar a que la propuesta llegue al escritorio del Presidente Obama a la mayor brevedad posible.
Las enmiendas de Hatch sobre las visas H-1B van en contra de los intereses de los trabajadores
El movimiento laboral no tiene proyecto de más importancia para el año 2013 que el de lograr que se establezca un sistema factible de inmigración que permitirá que unos 11 millones de personas deseosas de hacerse ciudadanos estadounidenses puedan realizar este sueño. Por eso, las organizaciones laborales han estado trabajando día y noche con grupos religiosos, los DREAMers y la comunidad dedicada a los derechos civiles para asegurar que podamos seguir adelante este año y crear este sendero hacia la ciudadanía.
Hasta este momento, han sido laudables los avances logrados sobre esta enmienda. Debido a la dedicación al trabajo por parte de tantos y por tanto tiempo, nuestra coalición amplia y diversa - ya no la para nada.
No hay motivo alguno por el cual esta coalición fuerte debe rendirse y aceptar enmiendas que van en contra de los intereses de los trabajadores. Hay que hablarlo claro: Las enmiendas del Senador Orrin Hatch's sobre las visas H-1B son ataques descarados contra los trabajadores estadounidenses.
Las enmiendas de Hatch cambiarían la propuesta de manera que las companies de alta tecnología pudieran, en efecto, contratar a poseedores de visas tipo H-1B sin tener que ofrecerlos primero a los trabajadores estadounidenses. Las enmiendas de Hatch permitirían que las corporaciones estadounidenses pudieran despedir a los trabajadores estadounidenses para poder reemplazarlos con los poseedores de una visa H-1B, a quienes les pagarían menos.
Puede ser que en este momento el próximo Sergei Brin esté sentado en una clase estadounidense. Pero si este futuro innovador no puede obtener un puesto a nivel de entrada en una compañía de alta tecnología porque los patrones prefieren importar y contratar a trabajadores temporales, las innovaciones empresariales no van a ocurrir en Estados Unidos.
Los magnates de la alta tecnología, tales como Larry Ellison y Mark Zuckerberg se han enriquecido mientras que los sueldos en el sector tecnológico se han estancado. Se están contemplando las enmiendas sobre la visa H-1B hoy, el mismo día en que el Ejecutivo Oficial Principal (CEO) de Apple está compareciéndose para testificar sobre los planes embusteros de Apple para evitar el pago de miles de millones de dólares en impuestos. Si se espera que algún día se les pague los beneficios a los trabajadores técnicos estadounidenses, tenemos que crear políticas que les paguen a ellos - a quienes de hecho escribieron los códigos de los programas - en vez de sólo entregarles las ganancias a los jefotes empresariales que les escriben cheques a los políticos. Nuestra meta debe ser lograr que el nuestro sea un país donde los jóvenes trabajadores en la industria tecnológica puedan pagar sus préstamos estudiantiles en vez de un país en el que Larry Ellison pueda seguir construyendo yates cada vez más ostensosos. Tenemos derecho a esperar algo mejor, merecemos algo mejor y, si es necesario, en el Senado de EE.UU, lograremos algo mejor.
Nos complace que hoy sea probable que el Comité Jurídico del Senado vaya a comunicar que ha producido una propuesta de ley que apoye un auténtico sendero hacia la ciudadanía. Vamos a seguir colaborando con nuestros aliados a fin de que se apruebe en el 2013 una reforma inmigratoria que incluya tal camino.
Foto: Únanse Aquí (Unite Here) y otros sindicatos laborales participan en la mega-marcha a favor de los derechos de los inmigrantes el 1o de mayo del 2006 en Chicago (PW/Pepe Lozano).