Una declaración del Partido Comunista de EEUU

Mientras los ojos del mundo están enfocados en Irak, la misma administración Bush que invadió ese país, contrario a la opinión pública mundial y estadounidense, usó la crisis para aumentar su presión pesada contra Cuba. Declarando con hipocresía que buscan que el pueblo iraquí escoja su futuro, la administración Bush – como los gobiernos anteriores – parecen totalmente incapaz de permitir que el pueblo cubano escoja el de ellos.

Como si las décadas de bloqueo económico, maldades e intentos de asesinatos, no fuera suficiente, la administración ha aumentado su entrometimiento directo. Esto incluye el papel de la Sección de Interés Estadounidense y su director, James Cason, en transmitir un sinnúmero de millones de dólares a la oposición que EEUU ha fomentado artificialmente a través de los años. El uso sin precedencia de la sede de la Sección de Interés y hasta el hogar de James Cason, por estos tal llamados disidentes es una provocación escandalosa.

Casi negándose a permitir la inmigración legal bajo el acuerdo del 1995 que permite a 20 mil cubanos entrar EEUU cada año, la administración Bush está haciendo todo para estimular la inmigración ilegal, incluyendo secuestros. Siete secuestros han ocurrido en los últimos siete meses, incluyendo el secuestro de un transbordador donde las pasajeros fueron constantemente amenazado con ser tirado al mar. Los autores de delitos de esta índole han sido bienvenido a EEUU.

Por muchos años el gobierno y el pueblo cubano se han contenido sin hacer nada ante el constante hostigamiento y entrometimiento. Esto es a diferencia de como las autoridades norteamericanas tratan a los cinco cubanos injustamente encarcelados por tratar de desenmascarar los grupos terroristas anti Cuba en la Florida. El reciente aumento de las actividades ilegales norteamericanas, combinadas con las amenazas, en los últimos días, de que Irak es “un buen ejemplo” para Cuba, ha forzado a Cuba actuar para poder sobrevivir.

En estas circunstancias, 75 cubanos fueron arrestados por activamente violar las leyes cubanas, y los tres secuestradores del transbordador fueron ejecutados. Viendo que Cuba está luchando por su propia vida, estas ejecuciones fueron hecha contra secuestradores que amenazaron con ahogar a pasajeros inocentes.

Sin embargo, el Partido Comunista, EUA, que ha denunciado a las más de 70 ejecuciones en EEUU el año pasado, y las más de 150 ejecuciones en el estado de Tejas bajo el gobernador George W. Bush, se opone a la pena de muerte bajo toda circunstancia. Nos unimos al llamado por su abolición universal.

Sin embargo, los que protestan las sentencias de los secuestradores cubanos también deben dirigir su oposición a la causa principal de la crisis actual – una administración norteamericana que continúa un bloqueo inmoral y cochinadas contra Cuba, y que ha demostrado que participará en ataques preventivos contra otros países incluyendo a Cuba. La política y acciones de la administración Bush está causando un clima de miedo sin precedencia entre las naciones del mundo.

Hasta muchos de los que están en desacuerdo con la selección de un sistema socialista por el pueblo cubano creen que las relaciones entre nuestros dos países deben ser normalizadas, y poner fin, de una vez para siempre, al comportamiento criminal hacia Cuba. Las relaciones diplomáticas normales y relaciones comerciales, el cumplimiento con las leyes internacionales y las normas diplomáticas, incluyendo el acuerdo de inmigración del 1995, el compartir el conocimiento médico, científico, y otros, y más contacto de persona a persona, son fines alcanzables que traerán enorme beneficios a los pueblos de ambos países.

Nosotros nos comprometidos continuar nuestro apoyo a los tremendos logros económicos, sociales, políticos y culturales del pueblos cubano y su gobierno, y a fomentar el movimiento más amplio para poner fin al bloqueo.