El gobierno ecuatoriano pide al pueblo que marche a rescatar al presidente Correa retenido en el hospital de la Policía. El canciller Ricardo Patiño habló ante la multitud frente al Palacio presidencial y pidió que los ecuatorianos salgan de todos los rincones del país de forma pacífica y masiva a la calle a expresar su apoyo a la democracia y rechazar el golpe de estado.
Informó que el presidente Rafael Correa esta en el Hospital de la Policía y desde allí ha denunciado que hay gente que intenta entrar por los techos para atentar contra su integridad personal. El canciller ha pedido que los grupos sociales vengan al palacio de gobierno a custodiarlo y otro grupo "vayamos a rescatar al presidente al Hospital de la Policía".
También se han convocado en diversas ciudades de América Latina manifestaciones frente a las embajadas de Ecuador.
Por su parte, el presidente venezolano Hugo Chávez ha incorporado un mensaje en su twiter denunciando que "Están tratando de tumbar al Presidente Correa. Alerta los pueblos de la Alianza Bolivariana! Alerta los pueblos de UNASUR! Viva Correa!!"
Un grupo de policías tomó este jueves a la fuerza el regimiento número 1 de la ciudad de Quito en protesta contra la negación al veto de la Ley de Servicio Público que contempla eliminación de bonificaciones y ascensos. El presidente de Ecuador, Rafael Correa se encontraba en lugar para intentar dialogar. Hizo un llamamiento a la calma, se abrió la camisa y gritó: "¡si quieren matar al presidente, disparen... aquí está!".
Los grupos agitadores policiales lanzaron bombas lacrimógenas contra el Presidente que abandonó el Regimiento Quito N°1 tras lanzarse por el muro dirigiéndose al Hospital de la Policía, en la Avenida Mariana de Jesús y Occidental, con ayuda de su escolta, a una altura de aproximadamente tres metros.
Correa permanece hasta el momento asediado en el Hospital de la Policía con una herida en la ceja y con ciertas complicaciones en su rodilla que recientemente fue operada. Los manifestantes permanecen a la salida del Hospital de la Policía para impedir una posible salida de Correa que teme por su vida. Mientras, en la Plaza Grande de Quito, aumenta la concentración de respaldo al Gobierno.
Igualmente el gobierno ecuatorianos ha declarado el estado de excepción por parte del las tropas leales a la democracia ecuatoriana.
El Jefe del Comando de las Fuerzas Armadas de Ecuador, Ernesto González, aseguró que están subordinados a la autoridad del presidente Rafael Correa, "Estamos en un estado de derecho. Estamos subordinados a la máxima autoridad que es el señor Presidente de la República", al resaltar que "Ecuador vive un estado de derecho".
El alto militar señaló que las Fuerzas Armadas deben resguardar la seguridad interna y externa, por lo que tomarán "las medidas que correspondan y las que pida el gobierno".
El gobierno ecuatoriano y su sistema democrático ha recibido también el apoyo de la OEA y de gobiernos latinoamericanos como el de Argentina, Venezuela, Brasil, Colombia o Chile. De igual modo, el gobierno de España, a través del ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha declarado que sólo reconocerá el gobierno de Rafael Correa. Por su parte, los diferentes colectivos democráticos no dejan de hacer llamamientos a la movilización en defensa de la institucionalidad de Ecuador frente al intento golpista y desestabilizador que se está viviendo por "los sectores más reaccionarios y derechistas del país", como han denunciando algunos diputados.
La indignación entre la ciudadanía ha aumentado al saberse que Rafael Correa ha resultado herido por la policía y necesitado asistencia médica. En estos momentos los llamamientos a la concentración popular en torno al palacio presidencial son constantes.
Por otra parte, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, señaló que las protestas no cuentan con el respaldo de la ciudadanía. "Es una decisión absolutamente inaceptable de parte de algunos sectores policiales, no de todos. El pueblo no está apoyando eso, se está movilizando a favor de su Gobierno, legítimamente vigente".
La Organización de Estados Americanos, OEA, convoca una sesión extraordinaria para tratar las situación. El Departamento de Estado de Estados Unidos afirmó sentirse sorprendido por la situación.