EAST HAVEN, Conn. -- El día sábado 25 de febrero a las doce del mediodía con el auspicio de la Comunidad de Inmigrantes de East Haven, Unidad Latina en Acción, The People's Center y el Representante Estatal de New Haven Juan Candelaria, centenares de ciudadanos conjuntamente con varias organizaciones comunitarias se hicieron presente en la Gran Marcha en Contra del Perfilamiento Racial.
En un colorido, pacífico y fervoroso ambiente más de quinientos participantes de múltiples nacionalidades hicieron el recorrido desde el Main Street hasta la alcaldía de East Haven expresando su condena a las violaciones de los derechos humanos, nativismo y perfilamiento racial que involucran al Departamento de Policía y al alcalde Joseph Maturo . Con armoniosos cánticos y pintorescas pancartas que leían "Fin al Perfilamiento Racial", "No somos Terroristas ni Criminales", "Unidos en la Lucha", "Todos somos Inmigrantes", etc. los manifestantes hicieron realidad lo que el Representante estatal Juan Candelaria había anunciado sería "una marcha de multitudes en que en las calles de East Haven harían ruido hasta escucharse en la alcaldía y que Joseph Maturo supiera que tiene una comunidad unida".
East Haven ha sido últimamente el foco de la atención nacional e internacional desde que en diciembre del último año el Departamento de Justicia reportó que perfilamiento racial y arbitrarias prácticas se llevaban en efecto en el Departamento de Policía. Como consecuencia de esta "conspiración para deprivar a hispanos y a otros miembros de grupos minoritarios de sus derechos" , cuatro oficiales de policía fueron arrestados con los cargos de "hostigamiento e intimidación a miembros de grupos minoritarios". Subsiguientemente el 3 de febrero el jefe de policía Leonard Gallo quien es citado por el Departamento de Justicia como "Co-Cospirador 1" renunció a su cargo.
Sin embargo, las ocurrencias de xenofobia no sólo involucran al Departamento de Policía sino también al alcalde Joseph Maturo quien es percibido por la comunidad como insensible. Maturo devolvió el cargo de jefe de policía a Leonard Gallo a pesar de que éste se encontraba en retiro y bajo investigación federal. Posteriormente Maturo recibió una verdadera tormenta de criticismo por haber respondido en frente de cámaras que "comería tacos" como respuesta a las necesidades de los latinos. El Governador de Connecticut Dannel P. Malloy se refirió a estos comentarios como "repugnantes".
El abuso, hostigamiento, intimidación y violencia física en contra de la comunidad latina habían alcanzado niveles alarmantes según los vecinos del lugar . La comunidad vivía en completa zozobra. Guillermo Estrella, residente de East Haven y víctima de violencia policial afirma que "el acoso y opresión de la policía estaba dirigido practicamente a todo latino", según Estrella, los patrulleros se estacionaban al frente de los negocios para "cazar" y "hostigar" a individuos en base del perfilamiento racial.
Con la finalidad de poner fín a estas prácticas ilegales e anticonstitucionales los organizadores de la marcha se habían planteado como exigencias principales la depuración del Departamento de Policía de East Haven y la renuncia del alcalde Joseph Maturo. Herman Zúñiga, presidente de la Comunidad de Inmigrantes de East Haven manifestó: "El perfilamiento racial no puede ser tolerado. Queremos cambio, queremos igualdad. Todos somos America". Antonio Arízaga del Frente Unido de Inmigrantes Ecuatorianos expresó que sus delegaciones de New jersey y New York se habían hecho presentes "junto a los hermanos latinos de East Haven para decirles ¡No más racismo! ¡No a la xenofobia!", y también para llamar, " a que el próximo Primero de Mayo marchemos multitariamente para manifestar nuestra unidad en contra del racismo".
En la opinión de organizadores, participantes y público en general la Marcha en Contra del Perfilamiento Racial fué todo un éxito. Según Migdalia Castro, Asambleísta-Concejal del área de Fair Haven del Condado 16 y Comisionada de Asuntos Puertorriqueños y Latinos la marcha para apoyar a los residentes de East Haven fué muy positiva. "La comunidad afectada por los abusos, el perfilamiento racial y el maltrato recibió el respaldo de grupos diversos, de anglos y afroamericanos y de todos los latinos que en unidad mostraron su apoyo para lograr que se haga justicia y que el racismo termine".
Según John Jairo Lugo de Unidad Latina en Acción, la marcha era necesaria porque las autoridades tenían que entender que "a la comunidad hay que respetarla, no sólo acá sino en todas partes, y los derechos civiles se ganan en las calles y en las calles es que uno debe exigir sus derechos".
Foto: Wilmer Barzallo/Mundo Popular
