Guinea está siendo escenario de una importante degradación de las relaciones entre las autoridades y el movimiento sindical. A lo largo de los últimos meses los dirigentes de la Confédération nationale des travailleurs de la Guinée (CNTG) han sido víctimas en repetidas ocasiones de ataques armados y de intimidación. La CSI condena enérgicamente estos hechos.
La situación se ha agravado considerablemente a partir de octubre de 2011. Entre otros, los Secretarios Generales y Adjuntos, Amadou Diallo, Mamadou Mansaré y Kader Aziz Camara, han sido respectivamente víctimas de amenazas, de ataque armado y de intimidación.
El Gobernador de la ciudad de Conakry ha ordenado asimismo el cierre de los locales de la CNTG. La injerencia del Tribunal Laboral en los asuntos internos de la CNTG ha sido denunciada varias veces. Por último, este 27 de marzo, los dos Secretarios Generales Adjuntos, Kader Aziz Camara y Mamadou Mansaré fueron interpelados por la policía.
"Nos identificamos plenamente con el movimiento sindical guineano", ha declarado Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI. "Es imposible que, en semejante clima de intimidación y de temor por la seguridad y la integridad física de sus dirigentes, éste pueda desempeñar su rol legítimo de contrapoder."
Estos ataques, amenazas e intimidación contra sindicalistas violan claramente los Convenios núm. 87 y núm. 98 sobre libertad sindical y negociación colectiva, ratificados por Guinea. En un correo enviado a las autoridades guineanas, la CSI exige al Primer Ministro Mohamed Saïd Fofana que tome rápidamente todas las medidas posibles para que la situación cambie y que los sindicalistas puedan ejercer su rol legítimo y sus derechos fundamentales en unas condiciones dignas de una democracia.
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