WASHINGTON - Más de 1.000 manifestantes gritando "Trabajos sí, recortes no," y "Fuera Boehner" se reunían en la sobra del Capitolio Federal el 5 de octubre para denunciar el obstruccionismo republicano contra el programa de $450 mil millones para empleos propuesto por el presidente Obama.
La manifestación fue celebrada a la conclusion de la Conferencia "Retoma al Sueño Norteamericano," que atrajo a 2.000 activistas de toda la nación para buscar estratígias sobre cómo quebrar el control de la derecha corporativa republicana en las elecciones de 2012 y crear una economía que sirva a toda la gente, no solo los élites.
"Somos el 99 por ciento," coreaba los presentes, ondeando pancartas que decían "Impuestos a los ricos" y "El trabajo que hay que hacer".
Linda Evans, proveedora de cuidado domiciliario en Washington, D.C., declaró a los manifestantes que ha estado sin trabajo desde hace tres años. Pasa mucho tiempo en el teléfono buscando trabajo y la respuesta es siempre "Te llamo de vuelta". Con lágrimas en los ojos, contaba que "Eso lo oigo tan seguidamente que estoy comenzando a pensar que es mi nombre medio. Estoy harto de estar sin trabajo".
Dirigiéndose a los legisladores en el capitolio, gritaba "¿Cómo pueden dormir Uds. sabiendo que la gente en el Distrito de Columbia tiene hambre y vive a nivel de pobreza? ¡Sirvan al pueblo! ¡Hagan crear programas que sirvan a los ancianos! ¡Hagan crear trabajos dignos para la gente que les eligieron!" ¡Salven a los bebés!"
Dijo Shawn Wygant, trabajador desempleado de Pittsburgh que "En un momento Pittsburgh se conocía como 'La Ciudad del Acero' Bien, pues, ahora se conoce como 'La Ciudad sin Trabajo'. Se derrumban los puentes, los caminos y las escuelas. Hay que reconstruir a América, reconstruir los puentes dilapidados. ¡Pongan a América a trabajar de vuelta! Si ellos se dirigen a la situación de empleos, van a ganar nuestros votos en 2012".
Gritó una voz de atrás de la muchedumbre, "¡La Cámara Baja es del pueblo! ¡Retómenlo en 2012!"
Dijo Ian Gillette, de Deerfield, New Hampshire, que fue descansado en el enero pasado. Tiene a tres hijos y acaba de perder su casa en una ejecución hipotecaria. Ha recurrido a una dispensa de caridad para la alimentación. Ha metido cientos de solicitudes de trabajo, pero ha conseguido solamente una entrevista. "Ya existen colonias de tiendas de campaña en New Hampshire en donde la gente se ve obligada a vivir en el aire libre con toda y sus familias. Han perdido sus trabajos, sus casas, sus autos. Tienen hambre. Estoy aquí para pedirle al Congreso que nos hagan el favor de aprobar el programa de trabajos. No debe ser tan, tan difícil. Tenemos que poner a América a trabajar de vuelta".
Pam Franklin, dirigente del Proyecto Amos de Cincinnati, una coalición de 25 iglesias, llamó a los presentes a venir a Ohio para ayudar a sacar el voto en el referendo del 8 de noviembre por derogar la ley antisindical SB 5 del gobernador John Kasich. "Voy a salir a la calle con todo y estas caderas estropeadas y voy a retomar al Sueño Norteamericano," dijo a risas y aplausos.
Van Jones, dirigente de la Campaña "Reconstruir a América" que patrocinaba el evento, introdujo a congresistas progresistas que, según él, "provienen de las bases," y "van cara a cara, pie a pie con los cabilderos altamente pagados, con el Tea Party, y nunca se doblan, nunca se rinden".
El representante Keith Ellison (Demócrata por Minnesota) conducía a la muchedumbre en corear "El pueblo, unido, jamás será vencido". Dijo él, "Las buenas noticias son que el movimiento progresista está en auge. Nos estamos organizando por todo EEUU. No vamos a parar. Vamos a conseguir la justicia que merecemos. Nos estamos escuchando. Queremos colaborar con Uds."
El representante Raul Grijalva, Demócrata por Arizona, rechazó a los que dicen que el movimiento por "Reconstruir a América" no es más que "una respuesta al Tea Party".
"No," dijo Grijalva, "este es distinto. No tiene que ver con el odio, ni el temor, ni la división. Uds.... se preocupan por esta patria nuestra, este sueño nuestro, y por restaurar la democracia a América".
La representante Sheila Jackson Lee, Demócrata por Texas, dijo, "¡Estamos levantando los banderines ensangrentados! ¡Nunca hay que rendirse! ¡Trabajos ahora; no a los recortes!"
Jim Doyle Wille, de Ellsworth, Colorado, dirigente del grupo "Alimenten a EEUU," dijo que un sentimiento de ira ya se está extendiendo y los votantes están "muy animados" para expulsar a los Republicanos en las elecciones de 2012. "Especialmente cuando ven al presidente de la Cámara Baja, John Boehner, bloqueando la ley propuesta de trabajos. Tenemos a 30 millones de desempleados y millones que van 99 semanas sin encontrar ningún trabajo. Se está extendiendo el hambre y van recortando los programas de alimentación. Ya es hora de imponerles impuestos a los ricos". Dijo ella que mañana estará en camino a reunirse con el movimiento "Ocupa a Wall Street" en Manhattan.
Dijo Shawn Wygant que ya hace muchos meses que fue descansado de la lavandería industrial Sodexho en Pittsburgh. "Me descansaron porque decían que no estaban sacando ganancias suficientes. Yo vivo junto con mi hermana, su esposo, sus dos hijos, y la abuelita. Compartimos los gastos. Es nuestro único modo de sobrevivir," dijo. "El terrateniente nos recortó la renta de $600 a $400. Soy diabético y no tengo seguro médico. Sacrifico mi insulina para mantener la luz prendida".
El ha asistido a dos de las reuniones de ayuntamiento del senador republicano Patrick Toomey en Pittsburg. "Es integrante del supercomité," dijo, refiriéndose a la comisión bipartidista de senadores y congresistas que fue asignada a encontrar $1,2 billones de drásticos recortes para el 15 de noviembre o antes. "Toomey necesita apoyar un regreso al trabajo para América y no los recortes," dijo Wygant. "Necesitamos menos palabrería y más acción".
Foto: Tim Wheeler/People's World