Al presidente de la federación sindical AFL-CIO, Richard Trumka, se ha expresado sobre el tema de las elecciones en Honduras, por medio de una carta abierta a la cancillera norteamericana Hillary Clinton.
Al principio, el gobierno estadounidense había sugerido que iba a unirse con la mayoría de los otros países del hemisferio, además de la Asamblea General de la ONU y la Organización de Estados Americanos (OEA), en no reconocer los resultados de las elecciones hondureñas para presidente, congreso y puestos municipales, que deben llevarse a cabo el 29 de noviembre, al no implementarse la restauración del presidente Manuel Zelaya y el orden constitucional, derrocados en el golpe del 28 de junio. Zelaya actualmente vive dentro de la embajada brasileña en Tegucigalpa, la capital hondureña.
El 30 de octubre, Clinton anunció un nuevo pacto que supuestamente iba a restaurar a Zelaya a la presidencia, formar un gobierno de "unidad nacional" y luego permitir que las elecciones fueran reconocidas por la comunidad internacional. Pero los lideres anti-Zelayistas del congreso decidieron no tomar un voto para aprobar a este pacto hasta después de las elecciones, y Roberto Micheletti, jefe del gobierno golpista, se declaró, en forma unilateral, jefe también del gobierno de "unidad" sin participación de Zelaya. Como resultado, el pacto queda totalmente deshecho, pero ahora el Departamento de Estado de los Estados Unidos dice que va a reconocer a las elecciones comoquiera.
En su carta a Clinton, Trumka cuestiona la posibilidad de tener elecciones justas bajo las condiciones que tienen que soportar los hondureños en la actualidad.
"Nos preocupa que el acuerdo de restaurar el Presidente Zelaya el 5 de noviembre a mas tardar (los acuerdos Tegucigalpa-San José) ya se ha deshecho. La negativa del Congreso hondureño de actuar en consultación con la Corte Suprema y otras instituciones y aprobar a la restauración del Presidente Zelaya, ha producido una situación inestable e insostenible. El anuncio por parte de Roberto Micheletti de un gobierno interino de unidad sin la representación del Presidente Zelaya invalida a las elecciones proyectadas para el 29 de noviembre.
"La actual ambiente en Honduras, que incluye un gobierno ilegitimo en poder, imposibilita elecciones libres, justas y abiertas. La represión violenta y coactiva aplicada a la oposición política al gobierno golpista y de facto, inclusive a sindicalistas, ha seguido. Por lo menos 12 sindicalistas han muerto por la violencia desde el 28 de junio. Organizaciones pro derechos humanos, tanto nacionales como internacionales, reportan que las violaciones de derechos humanos siguen, perpetrados por fuerzas de seguridad del estado, e incluyen asesinatos, golpazos severos, violencia sexual, encarcelamiento y tortura de activistas, además del arresto y detención de partidarios del presidente Zelaya.
"Por estos razones la [federación laboral] AFL-CIO exige que nuestro gobierno que aclara su oposición a la conducta de elecciones nacionales el 29 de noviembre al menos que se restaure al Presidente Manuel Zelaya a la presidencia y que se garanticen condiciones adecuadas para elecciones libres y justas. También pedimos que el gobierno de los Estados implemente las recomendaciones contenidas en la resolución aprobada en nuestra convención en septiembre".
Antes, la federación AFL-CIO y varios otros cuerpos sindicales en los Estados Unidos habían expresado su solidaridad con los obreros hondureños y exigido que nuestro gobierno trabajara para restaurar a Zelaya y las normas constitucionales.
Foto: AFL-CIO President Richard Trumka. http://www.flickr.com/photos/labor2008/ / CC BY 2.0