Traducido por: Jacques LaPere
El Comité Judicial del Senado estadounidense sigue realizando su segunda semana de "enmiendas" (o sea, votación sobre las enmiendas) de S 744, la propuesta de tamaño abrumador para reformar las leyes de inmigración, preparada por la "Pandilla de los Ocho" ("Gang of Eight") que consta de miembros de los dos partidos mayoritarios. Mientras tanto, se ha hecho cada vez más evidente que la mayor parte del país está a favor de resolver el problema inmigratorio al tomar medidas que incluyen una oportunidad prometedora para los trabajadores indocumentados y sus familias.
El lunes, un grupo de organizaciones que incluyen la AFL-CIO, la Defensa Legal y Fondo Educativo de los Mexicano-Americanos, Unidos Soñamos, la Red Organizadora de Jornaleros (AFL-CIO, the Mexican-American Legal Defense [MALDEF] and Education Fund, United We Dream, the National Day Labor Organizing Network) y muchos más emitieron una declaración en la cual insistieron no sólo en la reforma progresista sobre la inmigración sino también en acabar con las deportaciones de los a quienes, con toda probabilidad se les concedería el derecho de permanecer en EE.UU. si se aprobara dicha propuesta de ley. Además, le pidieron al presidente que emitiera inmediatamente una orden a ese fin.
El Consejero Legal General de MALDEF, el Sr. Thomas A. Saenz, observó en una comunicación de prensa: "Es sencillamente una cuestión equidad y justicia que desistamos de deportar a aquellos inmigrantes que pudieran reunir los requisitos para alivio bajo la legislación propuesta por los dos partidos para la reforma de las leyes inmigratorias. El Pueblo estadounidense y los líderes por todo el país de los dos partidos principales están a favor de proveer protecciones legales a los que han trabajado en nuestras industrias y criado familias en nuestras comunidades; sería cruel e insensato negarles a algunos el alivio que tantos favorecen y esperan, simplemente debido a una demora en la fecha de vigencia".
A pesar de que el gobierno en el pasado ha tomado la postura de que esto no es legalmente factible, los que apoyan este cambio dicen que sí lo es y señalan el hecho de que la misma administración de Obama emitió una orden de desistir de deportar a menores de edad quienes pudieran reunir los requisitos del Acta DREAM, por medio del programa conocido como DACA (Deferred Action for Childhood Arrivals o sea, Acción diferida para los que llegan como niños).
La postura al respecto que toma la AFL-CIO y otras organizaciones es esencialmente consistente con la que exige que se ponga tregua ("moratorium") a las deportaciones, una actitud que ha surgido de las bases del movimiento para los derechos de los inmigrantes a partir del fracaso de la legislación de 2006-2007 que intentó reformar las leyes inmigratorias.
En el pasado, la administración ha rechazado la exigencia de que se extienda ese concepto, admitiendo su temor de que esto pudiera molestar a los Republicanos y por consiguiente disminuir las probabilidades de que se apruebe la reforma de las leyes inmigratorias. No obstante, la Sra. Ana Avendaño, la portavoz de la AFL-CIO respecto a asuntos inmigratorios indica que la reforma de las leyes inmigratorias ya va en marcha y que por consiguiente a esa exigencia no se la detiene nada.
De hecho, una encuesta reciente muestra que a pesar de un esfuerzo manicheado por los derechistas durante décadas por hacer que los Afro-Americanos y la mayor parte de los inmigrantes (o sea, latinos) sigan oponiéndose, las comunidades Afro-Americanas ya respaldan tenazmente la reforma inmigratoria y la legalización de los indocumentados.
Dicha encuesta, llevada a cabo por los Lake Research Partners, indica que el 66 por ciento de los encuestados Afro-Americanos apoyan este tipo de reforma inmigratoria, y que sólo el 16 por ciento se oponen a ello.
A nivel del liderazgo nacional, los miembros Afro-Americanos del Congreso estadounidense y otros líderes comunitarios han apoyado de manera consistente la reforma inmigratoria progresista y la lucha por parte de los derecho de los trabajadores inmigrantes. Según esta encuesta, su concepto del movimiento de los derechos de los trabajadores inmigrantes, como una faceta de la lucha general para conseguir los derechos de las minorías parece haber hecho, por lo general, un impacto más significante que los esfuerzos de otros por proyectar la imagen de los inmigrantes y los latinos como rivales económicos. Otras encuestas han mostrado repetidas veces que la mayor parte de la población estadounidense (de todas las razas) apoya algún tipo de reforma inmigratoria progresista que les permita que se legalicen los trabajadores que, con la excepción de su condición de indocumentados, obedecen las leyes.
No obstante, hay todavía una inquietud entre los líderes Afro-Americanos con respecto a un aspecto de la propuesta S 744 ante el Senado: Los miembros Republicanos de la "Pandilla de los Ocho" eliminaron la lotería anual que otorga la residencia permanente, la cual, en la actualidad, es una de las pocas maneras en que los Africanos y los Antillanos pueden esperar a obtener permiso de emigrar a los EE.UU.
Dicha lotería otorga solamente 55.000 "tarjetas verdes" (o sea, visas de residencia permanentes) al año, pero a menos que se ponga en vigor de nuevo, va a reducir las oportunidades de los que pudieran inmigrar a EE.UU. de África y del Caribe.
Hay muchos recursos disponibles para aprender más sobre la verdad en cuanto a la situación de los inmigrantes en los Estados Unidoes, incluyendo el panfleto en línea "La inmigración: Mitos y Realidades" - Disponible para bajar de la red
Foto: Paulina Clemente/Flickr
