BRONX, N.Y. — Los residentes de la cooperativa Fordham-Bedford, donde viven miles de familias de clase trabajadora, estaban en una situación grave. Muchos no podían pagar sus cuentas de electricidad, y les habían cortado su servicio. Una madre que perdió su empleo no podía pagar su renta. La temporada de fiesta iba ser duro para los padres – no iban a poder comprarle regalos para sus hijos.

Entonces llegó Citgo.

El 6 de diciembre el congresista demócrata por Nueva York, José Serrano, junto con el jefe de Citgo, Félix Rodríguez, dirigentes de organizaciones comunitarias, y el embajador de Venezuela a EEUU, Bernardo Álvarez, entregaron la primera carga de 8 mi-

llones galones de aceite para calefacción para la ciudad de Nueva York, para venderse a los necesitados a precios reducidos.

Citgo, basado en Houston, es una refinería, distribuidor y vendedor de combustible y productos relacionados. La compañía es propiedad de PDV América Incorporado, subsidiario de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), compañía petrolera nacional de la República Bolivariana de Venezuela.

La primera vez que se habló de combustible a bajo costo para el Bronx fue en septiembre cuando el presidente venezolano Hugo Chávez estuvo en EEUU para la Cumbre Mundial de la ONU. Él visitó a Manhattan y el Bronx con Serrano. Ahí fue donde anunció que él ordenaría a PDVSA proveer combustible para familias de bajo ingreso.

El combustible será vendido a organizaciones comunitarias y cooperativas de viviendas en vez de dueños de apartamentos, a petición de Chávez, para prevenir que lo vendan a precios más alto. El combustible que será vendido a 40 por ciento del precio de mercado también se suministrará en el área de Boston y Chicago.

Eartha Bergenson, residente de Fordham-Bedford y recipiente de la ayuda energética, dijo, “Cuando [la compañía de electricidad] Con Edison vengan a apagar las luces, ahora podemos decirle, ¡Basta – ahora podemos pagar la cuenta!”. Ella dijo que su madre que perdió su trabajo va a poder recibir asistencia para pagar su renta porque los ahorros que la cooperativa recibe en el precio del combustible será para los residentes. Ella le dio las gracias a Citgo por el “regalo de supervivencia”.

Rodríguez, el jefe de Citgo, cuestionó la ética de las compañías petroleras privadas, diciendo que ayudando a la comunidad es tan importante al mercado estadounidense como haciendo buenos negocios. “Con esta iniciativa, Citgo muestra su compromiso al mercado estadounidense y a las comunidades donde tenemos una presencia”, él dijo. “Como buenos ‘ciudadanos corporativos’, estamos haciendo un esfuerzo para ayudar a los necesitados”.

El hecho de que la esta compañía es de propiedad pública hace esa visión posible, dijo Rodríguez. “Los accionistas de Citgo son la gente venezolana”, él dijo. “Nuestra relación con el pueblo estadounidense es muy importante”.

Aunque la administración Bush ha declarado a Chávez como un enemigo – hasta respaldar un golpe en el 2002, que debido a la resistencia popular fue derrotado – el presidente venezolano quiere al pueblo norteamericano. Después del desastroso huracán Katrina, Venezuela ofreció auxilio valorada en millones de dólares. Sin embargo, la administración Bush rechazó la oferta.

Respondiendo a la idea de que Venezuela simplemente estaba tratando de ganarse la opinión pública norteamericana, Serrano invitó a “cada corporación norteamericana que quiera ‘ganarse’ a mi comunidad que empiece ganársela esta misma tarde”. Él rechazó la acusación como una maniobra de las petroleras estadounidenses y la administración Bush por la vergüenza de que es Venezuela, un país en desarrollo, la que está ayudando a EEUU.

El distrito de Serrano tiene una población de 30 por ciento negra y 63 por ciento latinoamericana. Este programa de proveer combustible para los pobre está empezando en el noreste estadounidense donde 80 por ciento de todo el combustible para calefacción es usado.

En Massachusetts, coordinado con el congresista demócrata Bill Delahunt de ese estado, el combustible se suministrará a través de dos organizaciones sin fines de lucro. Una es la Alianza de Energía del Consumidor de Massachusetts, que ayudará a gente a través de grupos que proveen ayuda a familias de bajo ingreso, y la otra, la Corporación Ciudadana de Energía, proveerá combustible directamente a las familias.

Citgo puso anuncios en ediciones recientes de los periódicos The New York Times, Washington Post, USA Today y el Houston Chronicle. Los anuncios decían “¿Porqué hacemos esto? ¿Porqué podemos a la gente antes de las ganancias? Porque no simple somos cualquier petrolera. CITGO es ... la petrolera estatal propiedad de – y responsable al – pueblo de Venezuela”.

Los anuncios dicen que las ganancias petroleras en Venezuela son usada para “sostener la salud, alfabetismo de adultos e iniciativas para entrenamiento vocacional que ayuda a millones de venezolanos”. En cuestión de la ayuda humanitaria de Citgo, la compañía pregunta, ¿Qué puede ser más americano que esto?

El embajador Álvarez habló de la solidaridad entre EEUU y Venezuela, y dijo que a pesar las amenazas de la administración Bush hacia Venezuela, él veía al pueblo norteamericano como amigo.

“La relación entre los pueblos venezolanos y estadounidense es una larga relación, y estamos seguro que va a durar para siempre”, él le dijo a Nuestro Mundo. “Esto es un buen ejemplo de como podemos trabajar juntos, gente a gente”.