La maquinaria de ataque de campaña del Partido Republicano ha lanzado una ofensiva polifacética para falsamente acusar al candidato presidencial demócrata Barack Obama de ser antiinmigrante. En anuncios castellanos dirigidos a los votantes latinos en los estados de Florida, Nuevo México, Colorado, Nevada, John McCain acusa a Obama de bloquear una vía a la legalización.

Los sondeos muestran que en estos estados con un alto

porcentaje de la población de origen latino la contienda se encuentra cerrada. Otro estado donde quien ganará la lucha por la presidencia está en duda,

Virginia, también usaron los anuncios en español. Virginia tiene una creciente población latinoamericana.

A la misma, vez McCain y el Partido Republicano están diciendo en anuncios en inglés dirigidos a la extrema derecha del partido que Obama y los demócratas no están fuerte en contra de la “inmigración ilegal”.

Los anuncios en español acusa a Obama y sus colegas en el Senado de enmendar el proyecto de reforma migratoria conocido como Kennedy-McCain, y que el resultado fue su derrota. Los comerciales dicen que esto significó “ninguna vía a la ciudadanía, ninguna fronteras seguras, y ninguna reforma”.

La realidad es que Obama votó en favor de las reformas en 2006 y 2007. Él apoyó una enmienda para termina con el programa de trabajadores huéspedes después de cinco años. Los programas de trabajadores huéspedes son usados por las corporaciones para recortar los salarios y para que los trabajadores se enfrenten uno contra el otro. El senador republicano por Florida, Mel Martínez, también su unió a ese voto. Al limitar los programas de trabajadores huéspedes Obama y los otros senadores estaban tratando que el proyecto sea beneficioso para los trabajadores. El proyecto fue derrotado al fin por la oposición republicana.

Muchos dicen que McCain ha cambiado su enfoque “moderado” en cuestión de inmigración, rindiéndose a la extrema derecha republicana. Su compañera de formula, Sarah Palin, es aun más antiinmigrante que McCain,

dicen.

En una reunión el 10 de septiembre de Grupo Hispano del Congreso, Obama subrayó su compromiso a una reforma migratoria integral con una vía a la legalización. “Esta elecciones tiene que haber con los 12 millones que viven en las sombras, [y] las comunidades que están haciendo cumplir con las leyes migratorias por su propia cuenta”, él dijo. “Ellos están contando con nosotros para poner fin a la retórica de odio que llenan las ondas radiales y dejar atrás el temor, y dejar atrás a la demagogia, y por fin promulgar una reforma migratoria integral”.

Cuando los anuncios de McCain empezaron a salir, el grupo antiinmigarante Fair American Immigration Reform (Reforma Migratoria Americana Justa – FAIR) empezó cabildear al

Congreso con conocidos locutores de derecha. El 11 de septiembre, Lou Dobbs presentó un programa en vivo para apoyar a FAIR y la plataforma electoral republicana que dice que la inmigración es principalmente una “cuestión de seguridad nacional”, implicando que los inmigrantes son terroristas.

Además, las redadas de la agencia de Inmigración y Aduanas en sitios de trabajo que han aumentado por todo el país crea un ambiente de soporte para la agenda republicana.

America’s Voice (La Voz de América), una coalición que respalda la reforma migratoria integral, denunció a los comerciales contra Obama y la nueva campaña de cabildeo de FAIR, en una rueda de prensa el 15 de septiembre. La coalición pro inmigrante respondió comprando un anuncio de página completa en el diario The Washington Post. El anuncio mostraba el historial y lazos extremistas de derecha de FAIR.

John Trasviña del Fondo de Defensa Legal y Educación Méxicoamericano le dijo a la prensa que la Agenda Nacional de Liderazgo Hispano había pedido que McCain luche en contra de las formulaciones antiinmigrantes en el programa del Partido Republicano. Nunca les contestó, él dijo, y la plataforma fue incluida por unanimidad en la convención del Partido Republicano. Trasviña dijo que la plataforma republicana tenía lenguaje sobre inmigración que “dividiría a las familias”, excluye a los contribuyentes indocumentados del Censo del 2010 y cierra la puerta a estudios universitarios para niños que no tienen un número de Seguro Social.

Cecilia Muñoz del Concilio Nacional de La Raza dijo que aunque la inmigración como cuestión política esté por debajo de las cuestiones económicas y de la guerra en Irak para los votantes latinos, todavía es tema que toca las vidas de los hispanos y, por ende, determina a quienes los latinos consideran o los buenos o los malos.

“Puede ser que la inmigración no es uno de los primeros tres en la lista, pero es un fuerte motivador para los votantes latinos”, dijo ella.