Además de la Casa Blanca, ganan en el Congreso contra la política Bush

Junto con la victoria de Barack Obama a la presidencia el 4 de noviembre, los demócratas aumentaron su mayoría en el Senado por un mínimo de cinco escaños y 20 más a su mayoría en la Cámara de Representantes.

Los votantes en Carolina del Norte sacaron a la actual senadora republicana Elizabeth Dole y la reemplazaron con la demócrata Kay Hagan. Hagan es una legisladora estatal en el Senado de Carolina del Norte y casi desconocida afuera de ese estado del sur estadounidense. Mientras que en Nuevo Hampshire la ex gobernadora Jeanne Shaheen derrotó al actual senador republicano John Sununu.

Los demócratas también ganaron tres escaños vacantes para el Senado que anterior eran de republicanos. Los nuevo senadores demócratas son los primos Tom Udall en Nuevo México y Mark Udall en Colorado, además de Mark Warner en Virginia. Las mujeres hicieron ganancias históricas en el Senado – un tercio son femeninas.

A la hora de cierre, tres contiendas para escaños senatoriales no se habían decidido por los votos ser muy cerrados. Norm Coleman, actual senador republicano por Minnesota, estaba por delante del demócrata Al Franken por menos de mil votos y por ley tienen que contar los votos de nuevo. En Oregon, el senador republicano Gordon Smith está luchando para mantener su escaño en contra del demócrata Jeff Merkley pero expertos dicen que Merkely ganará.

En Alaska, estado de la que fue la candidata republicana para la vicepresidencia, Sarah Palin, su colega de partido político, el senador Ted Stevens, tiene la delantera por un margen pequeño sobre el demócrata Mark Begich, alcalde de la ciudad de Anchorage. El senador Stevens fue encontrado culpable de violar leyes federales por no reportar obsequios de decenas de miles de dólares.

La mayoría demócrata en el Senado, aunque fortalecida, todavía no tiene los 60 votos necesarios para prevenir que los republicanos usen tácticas para obstaculizar proyectos de ley.

Al fin, se espera que la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes sea a como 255 para los demócratas y 179 para los republicanos. Visto como Obama arrasó en los votos del Colegio Electoral y junto con el fuerte voto popular que recibió y el aumento de los demócratas en el Congreso, será difícil para que los republicanos usen tácticas parlamentarias para obstaculizar legislación como empezaron hacer después de que perdieron control de la cámara alta en el 2006.

Los demócratas también ganaron siete de las 11 contiendas para la gobernación de estados. Esto incluye la de la gobernadora Chris Gregoire en el estado de Washington que derrotó a su rival republicano hace cuatro años por solo 133 votos.

“Este es un nuevo día”, declaró Joelle Fishman, presidenta de la Comisión de Acción Política del Partido Comunista de Estados Unidos. “El impacto profundo de la elección de Barack Obama también fue reflejado en los resultados para la Cámara de Representantes y el Senado”.

Notando que un tercio del Senado nuevo será femenino, ella dijo, “Estas elecciones mostraron un cambio en el país en contra de la agenda derechista corporativa del gobierno de Bush”.

Obama, la Cámara y el Senado “tienen un mandato para dirigir a nuestro país en una nueva dirección – poner fin a la guerra en Irak, utilizar los recursos del país para un programa masivo de reconstrucción de la infraestructura del país y por ende crear millones de empleos ‘verdes’. Tenemos ahora la posibilidad de crear un programa de seguro de salud universal y promulgar la Ley de Libre Escoger para Empleads y así restaurar el derecho del trabajador a unirse a un sindicato. Necesitamos una reforma integral

del sistema de inmigración, financiamiento total de la educación pública, y un sinnúmero de otras necesidades humanas”.

Agregó la dirigente comunista que esta victoria “es el resultado de la movilización más extensa del pueblo trabajador y sus sindicatos en la historia del país, con la votación más extensa sin precedentes por los votantes afroestadounidenses, latinos, femeninos y jóvenes”. Ella señaló que las tácticas racistas y anticomunistas y otras que Karl Rove usó anterior para ganar elecciones fallaron este año. “Los votantes se dieron cuenta de lo que hacían”, dijo ella.

Por ejemplo, en el Distrito 11 de Pennsylvania, el actual demócrata Paul Kanjorski le ganó al republicano Lou Barletta. Barletta, es alcalde de Hazlton, donde promulgó unas leyes municipales en contra de los que hacían negocios con los inmigrantes indocumentados. Barletta usó esto para hacer campaña en contra de Kanjorski que ganó 52 por ciento a 48.

En Michigan, los votantes expulsaron al congresista republicano Joe Knollenberg al elegir al demócrata Gary Peters en el Distrito 9 del estado. Ese distrito no había tenido un congresista que no fuera republicano por 75 años. En el Distrito 7, el demócrata Mark Schauer derrotó al congresista republicano actual, Tim Wahlberg.

En California el demócrata Charlie Brown le lleva la delantera al republicano Tom McClintock para reemplazar al ex congresista republicano Tom Doolittle que fue obligado a renunciar por sus lazos de corrupción con el cabildero Jack Abramoff.

En el Distrito 1 de Maryland, que incluye la costa oriental y los suburbios alrededor de la ciudad de Baltimore, el demócrata Frank Kravotil, que tiene el apoyo del movimiento sindical, le llevaba la delantera al extremista de derecha republicano Andy Harris por mil votos. Harris le había ganardo al republicano moderado Wayne Gilchrist en las primarias del Partido Republicano. Debido al extremismo de Harris, Gilchrist apoyó al candidato del partido opuesto, Kravotil. A la hora de cierre de esta edición todavía se están contando los votos de los votantes ausentes y los votos provisionales.