Cuando los camioneros puertorriqueños, afiliados al Frente Amplio de Camioneros, decidieron hacer una huelga de un día para llamar atención a sus reclamaciones por una alza en las tarifas de carga, no pensaron que iba convertirse un una lucha que estremeciera al país. Los camioneros dice que los precios que han subido de la gasolina, entre otros, hace necesario subir lo que se le paga por 30 por ciento, aunque estaban pidiendo un aumento inmediato de 10 por ciento mientras hacen negociaciones para más.
Pero, por desgracia, la respuesta del gobernador colonial de esta nación caribeña fue de la de usar la policía nacional para obstaculizar a los camioneros que estaban en camino a los muelles para hacer piquete en protesta. Según Víctor Rodríguez, coordinador del Frente Amplio de Camioneros, la policía de Puerto Rico detuvo a los camioneros por orden de Pedro Toledano el superintendente de la policía nacional. Rodríguez acusó a la policía de violar los derechos civiles.
En vez de sentarse a negociar y resolver la crisis, las corporaciones navieras estadounidenses fueron al Tribunal Federal para conseguir un interdicto contra los camioneros acusándolos de prevenir otros camioneros que trabajen.
A la misma vez el gobernador Aníbal Acevedo Vila ordenó a la Guardia Nacional estadounidense en Puerto Rico a envolverse en la lucha en contra los camioneros, supuestamente para proteger a camioneros que quieran llevar carga.
En vez de negociar Acevedo Vila acusa a los camioneros de tratar de chantajear al gobierno y al pueblo. Mientras el gobernador calumnia a los camioneros, las fábricas usan la materia prima y a las gasolineras se le acaba la gasolina.
La escasez de gasolina hace que mucha gente vayan a llenar sus vehículos y causa peleas en las filas. Mientras tanto, algunos dueños de gasolineras tratan de tomar ventaja de la crisis y el Departamento de Asuntos del Consumidor se ve obligado a congelar los precios de la gasolina e imponen la multa más alta que la ley puertorriqueña permite - $10.000.
Mientras tanto, los sindicatos y otras organizaciones laborales de Puerto Rico salen a la defensa de los camioneros y casi no hay camioneros que rompan con la huelga y transporte gasolina.
Visto que el uso de medidas represivas no tuvieron ningún efecto, sino que motivó a más solidaridad de la clase trabajadora organizada y problemas en las calles sin adelantar hacia la derrota para los camioneros, el gobernador se vio forzado a pedir una reunión con ell Frente Amplio de Camioneros para llegar a un proceso para resolver los problemas.
Camioneros de Puerto Rico paralizan país