Coalición lucha contra recortes en salud y alimentos

WASHINGTON — Los constituyentes inundaron al Congreso con mensajes de ira esta semana protestando una resolución presupuestaria de la Cámara que recortaría los cupones de alimento, Medicaid y otras necesidades humanas por $50 mil millones, mientras le da a los ricos otro $79 mil millones en recortes de impuestos.

Rich Festa, director de acción política de la Alianza para Jubilados Norteamericanos, grupo afiliado a la AFL-CIO, se unió a hacer llamadas a los congresistas insistiendo en que voten contra los recortes. “El grupo más grande que recibe Medicaid es el de los ancianos en asilos. Obviamente, los recortes los van afectar a estos directamente. Típicamente, estas son mujeres solteras, débiles, más avanzadas de edad. Las víctimas de estos recortes serán quienes más los necesitan”. Hasta algunos republicanos están nerviosos, él dijo. “Ellos van a regresar a sus casas en las elecciones que vienen y tendrán que mirar a sus constituyentes en la cara y tratar de justificar esos recortes”.

Debbie Weinstein, directora ejecutiva de la Coalición sobre Necesidades Humanas (CNH) dijo, “Muchos miles enviaron correo electrónico y cartas o llamadas. Los legisladores están recibiendo el mensaje de que estos recortes no son aceptable, especialmente después de devastación causada por el huracán Katrina”.

La CNH escribió una carta firmada por 750 organizaciones que representan a decenas de millones exigiéndole a los congresistas que deben mejor aumentar el financiamiento para bregar con la crisis de la pobreza, hambre, desamparo y desempleo.

La búsqueda por los recortes empezó después de que el lídeer de la mayoría republicana en la Cámara fue forzado a dejar ese puesto al ser acusado oficialmente de lavar fondos. El Comité de Estudio Republicano, dirigido por los congresistas Jeff Flake de Arizona y Mike Pence de Indiana, empezó a decir que va a haber un déficit. Con ira porque el Congreso aprobó fondos para la reconstrucción de la región del Golfo de Méjico, ellos insistieron en que debe haber recortes de $500 mil millones en otros programas. No obstante, los presupuestos del Pentágono y de Seguridad Patria quedan fuera de los recortes. Estos usan las cantidades más grandes del presupuestos federal. A la misma vez este grupo está animando a Bush a que siga por los recortes de impuestos para los ricos que suman a $70 mil millones.

Weinstein dijo que se “recortan los programas de necesidades humanas por $50 mil millones y recortan los impuestos por $70 mil millones, entonces uno tiene un déficit peor de lo que tenía al empezar”.

Ella agregó, “Pedirle a los pobres que paguen por los esfuerzos extraordinarios, necesarios en la Costa del Golfo a través de los recortes en sus cupones de alimentos y Medicaid es una atrocidad. Es un descaro presionar para que se hagan más y más recortes de impuestos para los millonarios que tienen un promedio de $100.000 en recortes, puedan conseguir $120.000. Es una locura”.

Tanta locura que hasta los republicanos están divididos, dijo ella. “En la Cámara muchos republicanos moderados están alarmados por que estos extremistas están haciendo la agenda y que se le está pidiendo que voten por recortes en la salud y alimentos, especialmente después de los desastres en la Costa del Golfo”.

El senador republicano por Georgia, Saxby Chambliss, presidente de la Comisión del Senado sobre Agricultura, anunció que él no recortaría los fondos para los cupones de alimentos al recortar por $3 mil millones el presupuesto para el departamento de Agricultura. Weinstein dijo que eso es “una señal muy positiva”.

Ella alabó a la coalición que lucha contra los recortes. “Es aun más amplia de la que teníamos antes y estamos locos de contentos de ser parte. Esto es solo el comienzo. Necesitamos continuar estando en contacto con los miembros del Congreso para que ellos entiendan que peligrosos son estos recortes a los programas de bajo ingreso y a la gente que sirven. El próximo mes es un tiempo crítico donde hay real posibilidad de que estos recortes puedan ser derrotados”.

Los demócratas en la Cámara y el Senado, dijo ella, “están abrumadoramente opuestos a estos recortes. El otro lado tiene mucho dinero, pero la opinión pública está de parte de hacer que la economía trabaje para todos nosotros, no solo para los adinerados”.

La carta de la CNH alaba a los donativos de caridad después de los huracanes Katrina y Rita. “Aunque crítico para las necesidades de la gente”, declara la carta, “el gobierno debe ayudar a las familias a reconstruir sus vidas y a cubrir sus necesidades básicas como: empleo, ingreso cuando no hay trabajo, cuidado de salud, alimentos, educación, cuidado de niños y viviendas”.