Convención pone a comunistas en pie de lucha

CHICAGO — La 28 Convención Nacional del Partido Comunista de EEUU fue visto como un éxito en todos sus aspectos. Casi 500 delegados e invitados se juntaron el fin de semana del 4 de julio para discutir las actualidades y compartir un espiritu combativo de resistencia a los ataques corporativos derechista contra el pueblo trabajador.

Celebrando el empezar revolucionario de EEUU y la “segunda Revolución Norteamericana” que abolió la esclavitud, los delegados adoptaron un nuevo programa estratégico para derrotar a la ultraderecha, aumentar la democracia y continuar la lucha por un EEUU socialista – una tercera Revolución Norteamericana.

La convención adoptó una resolución política sobre la situación actual, junto con el informe principal del presidente nacional Sam Webb, eligió una nueva directiva – un Comité Nacional de 81 – y adoptaron resoluciones sobre varios temas. [Empezando con el próximo número, Nuestro Mundo publicará estas resoluciones - Editor]

Hubo apoyo unánime por resoluciones sobre Irak, exigiendo el retiro inmediata de las tropas y alabando el trabajo del Partido Comunista Iraquí, cuya militancia y directiva “luchó heroicamente” por los derechos democráticos y económicos bajo la dictadura de Saddam Hussein y continuó haciéndolo bajo la ocupación estadounidense. Los delegados respondieron de manera igual a una resolución exigiendo la extradición del terrorista Luis Posada Carriles de EEUU a Venezuela.

Los delegados participaron en talleres sobre cuestiones como la clase obrera y la globalización, protección del medio ambiente, y construir el Partido de base en el curso de la lucha. Hubieron presentaciones culturales muy animadas. Los delegados que llegaron temprano fueron estimulados por una gira de historia de clase obrera de Chicago.

Dos de los eventos más excitantes fueron la noche de solidaridad internacional y el piquete respaldando a trabajadores en huelga de un hotel.

En el evento de la noche de solidaridad internacional se presentaron discursos por representantes de partidos comunistas y obreros de 15 países. También se leyeron saludos de partidos fraternales que no pudieron asistir, incluyendo el Partido Comunista de Cuba, cuyos representantes fueron prohibidos asistir a la convención por las restricciones de viaje impuestas por el gobierno estadounidense.

El piquete con cientos de comunistas le dejó saber a los dueños del Hotel Congress y a la gente que pasaban que en Chicago los trabajadores están aun organizados.

Aun más importante, los participantes dejaron la convención del Partido Comunista con más ánimo de luchar por la justicia. Armado con su unidad, su política estratégica para derrotar a la ultraderecha, y su internacionalismo de clase trabajadora, el Partido Comunista está listo para la lucha.

Los que no fueron a la convención no pueden saber que excitante y militante fue la convención del partido. Pero los documentos, discursos, fotos y presentaciones en video se pueden ver en el sitio del Partido en la Internet – www.cpusa.org.