Inmigrantes negado entrada audiencia 'pública'

WATERBURY, Conn. - Más de cien trabajadores inmigrantes fueron físicamente excluidos del Centro de Gubernamental Rowland el viernes, 10 de mayo, cuando trataron de asistir a una audiencia pública del Departamento de Vehículos de Motores (DVM). Esta violación de derechos democráticos fue aun más alarmante viendo que la audiencia pública era para discutir una propuesta que prohibiría a inmigrantes, que tienen visas permitiéndolos vivir y trabajar en Estados Unidos temporeramente, a conseguir licencia de manejar.

'La democracia no se extiende a nosotros, los latinos en este país,' dijo una mujer con ira mientras trataba de recuperarse del gas de pimienta que le echaron en la cara. Dos personas fueron al hospital enfermos y con la ropa desgarrada, después que la policía estatal usaron el gas para no permitir que abrieran las puertas. Otras docenas pasaron botellas de agua para que los atacados pudieran limpiarse.

Varios legisladores de la Legislatura Estatal fueron testigo del incidente y prometieron que el DVM sería requerido hacer otra vista pública en un sitio grande y accesible. El DVM está requerido presentar sus propuestas a la Legislatura Estatal para que tome acción en la sesión legislativa del próximo año.

'Es ridículo que la gente afectada por estas regulaciones no fue permitida a hablar y oír el testimonio,' Blair Bertaccini, presidente del Consejo Central del Trabajo de Connecticut Occidental le dijo a la prensa.

La participación en la vista pública fue organizada por el Local 32BJ del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU por sus siglas en inglés)y la Asociación de Organizaciones Comunitarias para la Reforma Ahora (ACORN siglas en inglés) de la ciudad de Bridgeport. Los trabajadores viajaron a la vista pública en autobuses y tenían letreros preparados en español e inglés para dejar saber su posición.

Una pancarta decía '¿La vía no es lo suficiente difícil ya para los inmigrantes?' mientras otras decían 'No Paren el Proceso - Cede el Paso para los Inmigrantes' y 'Necesitamos manejar para ir a trabajar' entre otros.

Los trabajadores hicieron una rueda de prensa, en las escaleras del edificio gubernamental, donde dirigentes sindicales y oficiales electos hicieron uso de la palabra.

'Nosotros queremos que Ustedes sepan que no están solos,' dijo la representante estatal Lydia Martínez. 'Es importante dejarle saber al DVM qué necesitamos.'

'Ustedes trabajan duro para la prosperidad de este estado,' dijo el representante estatal Felipe Reinoso. 'Ustedes merecen una licencia. Vamos a trabajar para Ustedes.'

ACORN, SEIU y el Proyecto de Organización Sindical de la AFL-CIO han unido sus fuerzas con abogados de inmigración y grupos de empresas para protestar los cambios diciendo que es discriminación. En una carta colectiva presentada al comisionado Gary DiFilippo en la audiencia pública ellos pidieron una sita para discutir las recomendaciones, enfatizando en que 'Nuestras organizaciones representan a miles de residentes a través de Connecticut, muchas de las cuales son inmigrantes que serán mal afectada por las reglas antiinmigrante del DVM.'

Estas y otras medidas similares iniciadas desde el 11 de septiembre a través del país dirigidas en contra de los inmigrantes se están encontrando con protestas por ser irrelevante en la lucha para combatir al terrorismo.

'El DVM claramente se ha subido al tren antiinmigrante después del 11 de septiembre. Lo que están tratando de hacer es malo para las familias. Es malo para el comercio. Es malo para las compañías de seguro. Estas reglas no harán nada para asegurar la seguridad pública, lo único que asegurará es que tendremos más choferes peligrosos y sin seguro en nuestras carreteras', dijo María Casillas de Bridgeport y afiliada a la ACORN.

Los oradores subrayaron que en vez de prevenir a las familias de guiar al trabajo, a la escuela o al médico, que la mejor manera de proteger la seguridad pública y de asegurarse que todo chofer sea examinado, licenciado y pueda conseguir seguro de auto.

Alex Ruano de Stamford, originalmente de El Salvador, contó sobre sus dificultades en llegar al trabajo por causa de un sistema de transportación no adecuado en Connecticut. 'Mis compañeros de trabajo nos vamos juntos a trabajar. Si el chofer pierde su licencia, van haber cinco trabajadores de limpieza en Stamford sin manera de ir a trabajar ... El plan para prevenir que inmigrantes que tienen el derecho de trabajar en este país no puedan manejar es una ley mala.'

Declaraciones fueron sometidas a la vista pública para demostrar la incompetencia del DVM, que le ha negado licencia de conducir a varios individuos que son residentes legales permanente, diciendo que estaban aquí 'ilegalmente.'