Comentario
Hace poco leí en el diario Boston Globe dos artículos. Uno titulado, “CIA botó noventa y dos videos que filmaron los interrogatorios a gente sospechada de ser terroristas” y el otro “Memorándum Bush sobre terrorismo hecho público”.
Este último continúa describiendo los memorándum que estaba dedicados exclusivamente a como el aparato militar tiene derecho de registrar y arrestar sospechosos sin ninguna justificación legal o autorización de los aparatos jurídicos.
Estos hechos reviven memorias de un pasado lejano de unos sesenta años atrás. Era el principio de la Guerra Fría que empezó con la muerte del presidente Franklin Roosevelt, el ascenso a la presidencia del vicepresidente Harry Truman, y el lanzamiento de la bomba atómica contra Japón.
Aquí debo entrar un poco en la historia de aquella época. Los años de la depresión económica mundial que afectó a los Estados Unidos en el año 1929 y duró prácticamente hasta el año 1941, cuando Estados Unidos entró a la Segunda Guerra Mundial marcando un periodo muy particular en la historia del país. Un sistema netamente capitalista-imperialista bajo la conducción del presidente Franklin Delano Roosevelt, fue gradualmente adquiriendo un carácter casi socialista; WPA, TVA, Seguro Social, Socorro Doméstico, estos fueron algunos de los programas introducidos por la administración Roosevelt que daban al gobierno más participación en el alivio de las necesidades del pueblo.
El Partido Comunista tuvo mucha relevancia durante este periodo. Participaba en los diversos proyectos gubernamentales, organizaba sindicatos y algunos de sus miembros participaban en la política interna del país.
La primera dama, la señora Eleonor Roosevelt, organizó una tertulia junto con la Juventud Comunista en el prado trasero de la Casa Blanca.
En 1939, Alemania nazi invadió a Polonia y fue el principio de la Segunda Guerra Mundial. Un año después, los alemanes atacaron a la Unión Soviética quien dado la abismante condición económica del país había firmado un pacto con los nazi para así evitar la guerra.
Entonces el mundo capitalista de Gran Bretaña, Francia y los Estados Unidos se hizo aliado de la Unión Soviética Socialista.
La guerra duró cinco años. Finalmente, la Alemania nazi fue vencida y la Unión Soviética ocupaba gran parte de Europa oriental.
En abril de 1945, Roosevelt murió y fue reemplazado por Truman, el vicepresidente. El cambio fue notable. Ya Washington pasó a manos duras del capitalismo implacable.
En junio, Estados Unidos lanzó la primero bomba atómica del mundo en contra de Japón. Con esto el conflicto contra Japón fue terminado pero aun más importante, la bomba fue una advertencia a la Unión Soviética. El gobierno norteamericano no pensaba seguir el rumbo del “Nuevo Trato”, como se llamaba la administración Roosevelt.
El horror de la bomba electrizó al mundo entero. Fue el preludio a la Guerra Fría, que marcó el resto del Siglo XX y entró al Siglo XXI.
Desde Washington emanó lo que se expandiría por el mundo como la “cacería de brugas” o la extirpación en lo posible del “cáncer del comunismo”.
La década de los cincuentas entró con la organización de la Agencia Central de Inteligencia, que formó parte con el FBI en coordinar todos los esfuerzos de espionaje, infiltración y subversión que empleó el gobierno de los Estados Unidos contra el Partido Comunista.
El golpe más contundente fue la ejecución de Julius y Ethel Rosenberg en junio de 1953 por supuesto espionaje y entrega a la Unión Soviética de los secretos de la bomba atómica; cosa que nunca fue adecuadamente comprobado. Muchos piensan que con este acto Washington destruyó la función del partido en Norteamérica.
Desde entonces, más de sesenta años más tarde, el organismo capitalista/imperialista sigue con el sistema de espionaje y combate contra el comunismo o como se llama ahora, el “terrorismo”. Esta palabra significa que cualquier movimiento o esfuerzo por parte de cualquier rinción del mundo que se opone a los intereses militar-económicos de este país.
Analisis > La CIA sigue con lo mismo