Comentario
La derecha en el Congreso de Estados Unidos, aglutinado en el Partido Republicano, está trabajando para que el gobierno de Barack Obama acepte el golpe de estado en Honduras. Para este propósito buscan pasar una resolución en el Congreso. Mientras tanto, un grupo de congresistas del mayoritario Partido Demócrata tienen una resolución condenando al golpe y exigiendo que el gobierno del presidente Barack Obama tome acciones más fuertes contra los golpistas.
Uno pensaría que con el anuncio del presidente Obama que EEUU solo reconoce al presidente Manuel Zelaya y no los golpistas, esa resolución tendría más de 44 congresistas apoyándola.
Los intereses imperialistas estadounidenses tienen su apoyo en ambos partidos de la burguesía norteamericana. Esto se vio claramente en un debate entre el licenciado Lanny Davis el profesor Greg Grandin en el programa progresista noticioso, Democracy Now. Grandin defendía al presidente Zelaya mientras que Davis apoyaba a los golpistas.
Davis, que está trabajando para el Consejo Empresarial de América Latina en Honduras, es un abogado con lazos estrechos con Bill y Hillary Clinton. Davis fue el abogado defensor de Clinton cuando los republicanos le hicieron un juicio político en el Congreso y actualmente está cabildeando a los congresistas demócratas para que apoyen al golpe.
Tratando de defender lo indefensible en el debate, Davis empezó con ataques personales contra Amy Goodman de Democracy Now, que estaba moderando el debate, y contra el profesor Grandin. Otra táctica que usaba era la de interrumpir a Grandin y tergiversar la realidad de lo que pasó en Honduras.
Pero peor que las mentiras y distorsiones de los hechos, los ataques personales y las ininterrupciones, fue el uso de un nuevo macartismo – táctica hecha famosa por el senador republicano Joe McCarthy de pintar a todos sus oponentes como comunistas para crear un ambiente de temor y acoso. Davis acusaba a Zelaya de ser controlado por los presidentes de Venezuela y Nicaragua – Hugo Chávez y Daniel Ortega, respectivamente.
Este abogado de Partido Demócrata usa la táctica de la derecha como lo hace el mandatario derechista de Colombia, Álvaro Uribe, que ataca a sindicalistas, activistas por los derechos humanos, campesinos y otros tildándolos de ser parte de las guerrillas.
Aunque fue una táctica que los republicanos y otros sectores derechistas usaron en contra de Barack Obama cuando era candidato y continuando hasta hoy, el macartismo es una táctica del imperialismo, no importa de cual partido provenga.
Es una táctica que confunden a muchos, pero no importa cuantas veces la usen no podrán detener a la marcha adelante de los pueblos.
La otra cara del golpe