Por años los estudios hecho de la comunidad latina en Estados Unidos ha demostrado que un 30 por ciento de los estudiantes de habla hispana dejan a la escuela antes de graduarse. Pero un estudio recién hecho por el Centro Hispano Pew aclara más la situación de los estudiantes hispanos. De acuerdo a Richard Fry, un investigador del Centro, los números citados incluyen a nuevos inmigrantes que nunca han asistido a una escuela en este país.
Según el estudio, uno de cada tres jóvenes latinos “son educado en el extranjero y la mayoría en este grupo viene a EEUU en busca de trabajo”.
Sin embargo, la cifra para estudiantes latinos entre las edades de 16 y 19 que estudian y después dejan el sistema educativo en EEUU es un 15 pro ciento, la mitad de lo que se pensaba antes. Esa cifra todavía es alto, visto que es doble la de los jóvenes blancos.
El estudio dice que 40 por ciento de esto estudiantes no dominan el inglés. También demuestra que entre los que no dominan el inglés, 59 por ciento dejan la escuela.
El estudio concluye diciendo que se necesita buscar formas para ayudar a los estudiantes latinos quedarse en la escuela.
Pero todo estudiante que deja o no asiste a la escuela no lo hace por querer. El Consejo Nacional de La Raza (NCLR por sus siglas en inglés) advirtió el año pasado que “hay algunos sistemas escolares que deciden poner barreras innecesarias en sus caminos. Por ejemplo, algunas escuelas y distritos escolares le han estado pidiendo a los padres latinos que muestren prueba de residencia antes de inscribir a sus niños en la escuela”. El NCLR le dice a los padres latinos “que todo estudiante, sin respeto a su condición de inmigrante, tiene el derecho a la educación pública”.
Los jóvenes indocumentados latinos también tienen otro problema. Muchos de ellos llegaron a una temprana edad con sus padres que buscaban salir de la pobreza de sus propios países. Estos jóvenes pasaron toda sus vidas en el sistema escolar norteamericano. De estos, los que se gradúan de la escuela superior, muchos desean ir a la universidad pero no pueden porque se le cobra una matrícula alta por no ser residente legales de EEUU según una ley federal.
Muchos estados dicen que esto es una injusticia y han cambiado sus leyes para poder permitir que estos estudiantes asistan a las universidades del estado donde viven. También hay un proyecto de ley en el Congreso para abolir esa estipulación en la ley federal y permitir a los estudiantes indocumentados estudiar después que se comprometan con hacerse residentes legales de EEUU.
Latinos: Menos deserción escolar