Querido DiálogoEcológico: No comprendo por qué tanta gente se opone a la energía eólica simplemente porque tienen que mirar turbinas. Si usted me pregunta, las turbinas de viento son mucho más agradables que las plantas a carbón o nucleares. - Michael, a través de email
¡Ya sea una granja de viento, una central eléctrica que quema carbón, un reactor nuclear o incluso una supertienda de descuentos, siempre habrá gente local opuesta al proyecto, declarando "no en mi vecindario"! (NEMVE).
En cuanto a la atracción de las granjas de viento, el público parece favorecer un lado o el otro del debate más bien vehementemente. Los que están a favor del desarrollo de viento han a menudo ensalzado las virtudes visuales de un horizonte lleno de molinos de viento no sólo por las líneas de escultura elegantes de las turbinas, sino también por el hecho que su presencia misma anuncia el arribo de una edad moderna casi futurística de energía limpia y renovable.
Escribiendo en la revista Contemporary Aesthetics, Yuriko Saito se muestra elocuente acerca de la atracción visual de las granjas de viento cuando se diseñan con esmero. "Es posible crear un efecto estéticamente agradable escogiendo el color, la forma y la altura de las turbinas apropiadas...al paisaje particular, haciéndolas uniforme en apariencia y movimiento, y...arreglandolas en proporción al paisaje," señala él. "Un escritor admira los molinos de viento en Suecia como 'objetos elegantes' porque 'los planos aerodinámicos esbeltos parecen tanto delicados como poderosos ... a la vez que su movimiento apacible imparte un sentir de naturaleza cinética'."
Por el reverso de la medalla, los detractores atacan las turbinas de viento por destruir sus vistas - una postura clásica de NEMVE. Según Saito, la oposición a las granjas de viento se origina en haber sido situadas anteriormente en "tierras abiertas sin obstáculos en el horizonte" y como tal "son percibidas como máquinas que inmiscuyen en un jardín". Agrega él: "Son casi siempre denigradas como elementos que "estropean", "arruinan", o se 'imponen" en un paisaje de otro modo relativamente natural e inmaculado, como desierto, campo abierto, falda de montaña, y ... océano, y que así crean una "monstruosidad"."
Respondiendo a una encuesta de la revista Country Life los lectores citaron las turbinas de viento como el tipo de adefesio arquitectónico más atroz a través de Inglaterra. Detestaban las turbinas de viento más que otras "monstruosidades" - como áreas de servicio en las carreteras, centrales eléctricas convencionales y bloques de oficinas feos - a causa del tamaño de las turbinas, algunas de las cuales miden 100 m, y su intrusión en el paisaje.
Los adversarios de una granja de viento propuesta en las aguas de la Sonda de Nantucket de Massachusetts citan quejas semejantes. El constructor, Cape Wind Associates, ha hecho campaña durante siete años para aprobar la construcción del proyecto, a ser ubicado a 16 millas de la costa de la Isla de Nantucket. Propietarios, políticos y algunos ecologistas evidentemente en conflicto con respecto al asunto han montado una oposición firme a la instalación, que de la costa parecería como manchas blancas lejanas en el horizonte. La decisión descansa con el Ministerio del Interior de EEUU que, a pesar de haber indicado repetidamente su deseo de querer expandir la energía eólica costa afuera, se está moviendo con lentitud en relación con este asunto tan sumamente contencioso.
Pero con el viento la fuente de energía renovable de más moda en la actualidad, es mejor que los oponentes a ver molinos de viento se acostumbren a ello. En 2008 la energía eólica proporcionó el 1,5 por ciento de la electricidad global - habiendo duplicado su producción cada año por cinco años consecutivos - y debería representar tanto como un ocho por ciento para 2018.
Contactos: Contemporary Aesthetics, www.contempaesthetics.org; Country Life, www.countrylife.co.uk; Cape Wind Associates LLC, www.capewind.org.
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