WASHINGTON – La administración Bush sufrió una derrota en su plan energético. Los proponentes del plan no pudieron conseguir los votos necesarios para poner fin al debate el 21 de noviembre en el Senado. El proyecto de ley le daría recortes de impuestos de más de $23 mil millones a las compañías de petróleo, gas y carbón. Se necesitan 60 votos para terminar el debate y solo se consiguió 58.

El senador republicano por Arizona, John McCain, dijo que el proyecto era lucrativo para las corporaciones petrolera, de gas y el lobby energético, además de los contribuyentes a la campaña de George W. Bush y su vicepresidente Dick Cheney. El senador demócrata por West Virginia, Robert Byrd, dijo sarcásticamente que el plan “haría tanto para mejorar la seguridad energética, como la invasión de Irak ha detenido la ola global de terrorismo”.

El proyecto de ley, escrito solamente por los legisladores republicanos, con la supervisión del vicepresidente Cheney, le costará al público $115 mil millones durante la próxima década, de acuerdo a un análisis hecha por el congresista demócrata por California, Henry Waxman.

Aunque el proyecto no levanta la prohibición contra la exploración por petróleo y gas en el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico, provee $2 mil millones para un nuevo gaseoducto que vaya desde Alaska hasta Chicago, indicando que se va continuar la lucha para abrir el Refugio a la exploración petrolera. El plan incluye $25,7 mil millones para la próxima década en “incentivos” para recortes de impuestos para los productores de energía. Waxman dijo, “Estos costos son subsidios para la industria [energética], recortes de impuestos, autorización para nuevo gasto gubernamentales, y mandatos que aumentan el precio de la gasolina y la electricidad a los consumidores”.

Otra controversia en el proyecto fue una sección que prohibe que se pueda demandar a las compañías que manufacturan la química MBTE. El MBTE se usa como un aditivo en la gasolina para que el combustible se use más eficientemente y no contamine tanto al aire. Desafortunadamente, el uso del MBTE contamina al agua y puede que cause cáncer.

La organización cibernética de base, Moveon.org, había instado a sus 2.000.000 afiliados a bombardear a los senadores con mensajes exigiendo que voten contra poner fin al debate sobre la propuesta. “El proyecto fue desarrollado en secreto – primero escrito por un grupo de trabajo de Cheney, donde la lista de quien participó se mantuvo en secreto, hasta del mismo Congreso, y fue finalizado por los senadores y congresistas que, literalmente, dejaron a los demócratas fuera de las negociaciones finales”, acusó Peter Schurman, organizador de Moveon.org. “Esto es escandaloso e inaceptable. La última vez que el presidente Bush nos hizo tragarnos algo desconocido, nos dieron la Ley Patriota ... En el contexto de los reciente apagones y la guerra en Irak, todos de nuestros senadores estarán bajo gran presión para aprobar un proyecto de energía, aunque no se dirija a los problemas claves, como este”.

Zach Corrigan del Grupo de Investigaciones en el Interés Público dijo que el proyecto “elimina la protección de aire limpio que millones de americanos tienen. Permite que comunidades que tienen una calidad de aire que está deteriorándose, demoren la limpieza ... Como resultado, norteamericanos van a sufrir de miles de más ataques de asma, hospitalizaciones, visitas a las salas de emergencia y nuevos casos de asma”.

Hasta el diario The New York Times exigió que los senadores no paren el debate “y lanzen este proyecto espantoso al mundo de la muerte legislativa donde pertenece”.

José A. Cruz contribuyó a este artículo.