WASHINGTON – Haciendo como si fueran millonarios más de mil personas marcharon a la residencia del vicepresidente Dick Cheney, el 6 de junio, para “darle las gracias” por los miles de millones en recortes de impuestos mientras cortan el presupuesto para el programa de Medicaid y para la educación.

La marcha era parte de la conferencia de la Campaña para el Futuro de Norteamérica (CFN) que juntó a 1.500 activistas laborales, de derechos civiles, pro igualdad de la mujer, pacifistas y ambientales para discutir una estrategia para derrotar a George W. Bush y poner fin al control del Congreso por los republicanos en las elecciones del 2004.

Maxine Durst, una empleada jubilada de American Airlines, vino con su hermana desde Fort Worth, Tejas. “Bush fue un mal gobernador y ahora es el peor presidente que ha habido”, dijo Durst marchando. “Yo creo que él es maquiavélico dijo John Campbell, un organizador para el Local 31o del sindicato siderúrgico en Des Moines, Iowa.

En su discurso a la conferencia, Leo Gerard, presidente del Sindicato Unido de Obreros Siderúrgicos, dijo que la mayoría progresista del país “retomará a Norteamérica”. “Nadie llegará a la Casa Blanca en el 2004 sin venir a través de nosotros. La mayoría, una vez desunida, ahora está unida”.

La congresista demócrata por Illinois, Jan Schakowsky, criticó a los republicanos de la Cámara por derrotar una enmienda al proyecto de recortes de impuestos de $350 mil millones que le daría una migajas a los trabajadores pobres. Ella dijo que el líder de la mayoría republicana, Tom DeLay, dijo que él lo consideraría solo si le otorgamos más recortes para los ricos permanentemente.

John Sweeney, presidente de la AFL-CIO, criticó a DeLay porque el líder republicano llamó a los sindicatos un peligro para el país, mientras Bush dice que los sindicatos son una “amenaza a la defensa patria”. Sweeney dijo que era una ola de ataques contra los trabajadores y sus sindicatos de parte de los republicanos.

‘Seguridad en un mundo diferente’ era el título de una sesión plenaria. Tom Andrews, director nacional de la organización Ganar Sin Guerra, advirtió que Bush será derrotado si su apariencia como el defensor de la seguridad nacional es rebajada. Él pidió que el movimiento se dirija al trauma que el pueblo sufrió por los ataques terroristas del 11 de septiembre. ¿Estamos más seguro ahora? preguntó. “Bush ha hecho de Estados Unidos no solo el policía del mundo, sino un dictador global que no tiene que rendirle cuentas a nadie”. Él añadió que se tiene que movilizar a votantes que se puedan influenciar, que tienen dudas sobre la ocupación de Irak y la política de guerra preventiva”.

Robert Borosage, codirector de CFN, estaba contento con está, la cuarta conferencia que su organización ha auspiciado. “La diferencia es que nuestros socios de la coalición han traído a cientos de activistas de base a esta conferencia”, él le dijo a Nuestro Mundo. “Esto significa que si uno es un candidato presidencial, tiene que venir aquí y presentar su programa”.

De los siete precandidatos para la presidencia que hablaron, los favoritos fueron los que criticaron la doctrina de Bush. Dennis Kucinich, demócrata por Ohio, dijo que él había introducido la Resolución Número 260 de la Cámara para requerir que Bush explique las mentiras que dijo sobre Irak. Él expresó su orgullo de que era uno de los 206 congresistas que votó contra la resolución de guerra contra Irak. Kucinich dijo que las verdaderas “armas de destrucción masiva” son la pobreza, el desamparo, y la falta de servicios de salud para 41 millones de gente. “Yo digo que este sistema de salud está roto y la única manera de arreglarlo es Medicare para todos. Como presidente, yo tomaría dinero del Pentágono para servicios de salud y la educación”.

Otro candidato, el reverendo Al Sharpton exigió saber donde estaban las armas de destrucción masiva. “Todo lo que Bush busca, no lo encuentra. Eso no debe sorprender a nadie porque yo no puedo encontrar los votos de la Florida que lo pusieron en la Casa Blanca. Tenemos que responder a lo que ellos hicieron en Florida en el 2000, en las urnas en el 2004”.

El reverendo Jesse Jackson dijo que la “vía a la victoria” en el 2004 atraviesa los estados donde Bush ganó por poco en el 2000, incluyendo el Sur, que antes era demócrata y ahora es republicano. “podemos romper con eso – 600.000 afronorteamericanos en Georgia no están inscrito para votar. Podemos salvar el Sur y salvar a la nación. Podemos ganarle a George W. Bush. Otra vez”.

Se puede comunicar con Tim Wheeler al greenerpastures21212@yahoo.com