Viajes de Libertad para Inmigrantes empiezan

Con mucha alegría, manifestaciones en cuatro ciudades del oeste despidieron a los primeros contingentes de los Viajes de Libertad para Trabajadores Inmigrantes el 20 de septiembre. Esto es el empezar de una de las campañas más grande por los derechos de los trabajadores inmigrantes y sus familias en la historia de Estados Unidos.

Esta movilización, que tiene el fin de enfocar la atención pública sobre la injusticia en la actual política inmigratoria del país, está tomando una página de los Viajes de Libertad del 1961 cuando blancos y negros viajaron a través de los estados del sur del país para protestar la segregación por raza en los autobuses y salas de espera.

Servicios y mercancía producidos por los inmigrantes indocumentados en la fuerza laboral estadounidense componen la base para mucha de la prosperidad de este, el país más rico del mundo. A pesar de esto, estas familias son consideradas “ilegales” y son forzadas a una existencia de superexplotación, sin acceso a los instrumentos necesario para vivir tal como, licencias de conducir, educación superior, servicios de salud.

Decisiones legales le han quitado las sanciones contra las compañías que violan los derechos de los trabajadores indocumentados en toda las áreas – normas de paga, derechos de organizar sindicatos, seguridad y discriminación. Visto que los trabajadores inmigrantes constituyen una parte principal en todo sectores clave de la economía, en cada región del país – procesamiento de alimentos, construcción, agricultura, manufactura, y servicios de salud – ganar derechos para los inmigrantes es una cuestión de vida o muerte para el movimiento laboral también. Terrence O’Sullivan, presidente del sindicato de trabajadores de la construcción, dice “Ningún trabajador en Norteamérica está seguro hasta que los trabajadores inmigrantes tenga el derecho de enfrentar a su jefe y reclamar sus derechos”.

La legalización y el establecimiento de una “vía a la ciudadanía”, incluyendo el derecho al voto, está por encima de la agenda de los Viajes de Libertad, de acuerdo a la presidente de la campaña María Elena Durazo, líder del Local 11 del Sindicato de Empleados de Hoteles y Restaurantes. Igual de importante, dijo ella, son los fines de la reunificación de familias dividas por leyes injustas de inmigración, y derechos pleno para los trabajadores inmigrantes en el trabajo. Durazo, que viajó por todo el país en favor de los derechos de los inmigrantes, le dijo a la manifestación de despedida a los viajeros en Los Ángeles, “Queremos que nos traten como todo norteamericano porque hacemos lo que hace todo norteamericano en este país”.

Observadores han notado que no es coincidencia que estos sindicatos, entre otros, que se han unido para lanzar esta campaña histórica en la reunión de la Junta Ejecutiva de la AFL-CIO del invierno pasado, están entre los que más éxito tienen en organizar dentro de la federación laboral.

Estos incluyen el sindicato de la industria de la aguja y textil (UNITE), empleados de servicios (SEIU), alimentos y comercio (UFCW) y trabajadores agrícola (UFW).

Esa tarde cuando el sol bañaba la costa oeste del país, las manifestaciones de despedida en Seattle, Portland, San Francisco y Los Ángeles demostraron la maravillosa diversidad de los inmigrantes del país y sus luchas particulares y comunes.

“Yo estoy en EEUU por tres años y espero un porvenir mejor porque ahora es mi hogar”, dijo Juan Carlos Huezo, un trabajador de seguridad de aeropuerto en el área de San Francisco y miembro del Local 790 del SEIU. Huezo dijo que está contento de ser un Viajero para la Libertad porque, como él lo ve, es una manera para ayudar a gente hacerse ciudadanos. Él dice que muchos de sus compañeros de trabajo temen hablar por miedo de causar a después no ser permitido traer a sus familiares a este país. “Yo todavía quiero poder viajar a El Salvador y ver a mi bisabuela que me crió”, Huezo añadió.

Autobuses de inmigrantes y sus partidarios que están haciendo un viaje transcontinental de 12 días y llegará a Washington el 1 de octubre, donde cabildearán en el Congreso antes de ir a una masiva concentración en Queens, Nueva York el 4 de octubre. Cada autobús tiene su ruta única; las primeras paradas serán en las comunidades del Valle Yakima de Washington, Sacramento y Palm Springs. Después, los autobuses de cruzarán las Montañas Rocosas para participar en manifestaciones en Boise, Salt Lake City, Denver, Albuquerque, Cheyenne, y Tucson. Un autobús también salió de Las Vegas esta semana.

Cada uno de los más de 100 sitios que visitarán en camino subrayará las luchas de los trabajadores inmigrantes. La meta de estas actividades ambiciosas es más que hacer una declaración, dijo Durazo. “Estamos construyendo coaliciones locales de los grupos de derechos del inmigrantes, sindicatos, grupos religiosos y de la comunidad para ampliar el consenso en favor de los derechos de los inmigrantes”, ella le dijo a Nuestro Mundo. Para cumplir con estas metas, dijo Durazo, “Necesitamos un nuevo Congreso y una nueva Casa Blanca”. Ella ve a los Viajes de la Libertad como una parte importante para movilizar para las elecciones del 2004.

“Los primeros viajes de libertad tomaron lugar en el 1840 y fueron una protesta contra las leyes Jim Crow [segregacionistas] en trenes y viajes por coches en Pennsylvania, Nueva York, y Nueva Inglaterra”, dijo el reverendo James Lawson, uno de los coordinadores de los Viajes de Libertad del 1961. En una declaración del Día del Trabajo, publicada por el Comité Ecuménico Nacional por la Justicia para Trabajadores, él notó que los abolicionistas, blancos y negros, incluyendo a Federico Douglas, protestaron y desafiaron esas leyes.

Durante los Viajes de Libertad del 1961, aunque se quemaron autobuses, y los viajeros fueron atacados salvajemente, facilidades públicas fueron establecidas. Con la Ley de Derecho al Voto en 1964,millones de ciudadanos afronorteamericanos a través del Sur ganaron el derecho a votar.

La manifestación de Seattle, cerca de la Fuente Internacional, fue asistido por 350 personas incluyendo el Coro Laboral de Seattle y el coro evangélico Total Experience, el congresista demócrata por Washington, Jim McDermott, dijo que los Viajes de Libertad son “una manera de organizar la resistencia que necesita crecer antes de las próxima elecciones”. “Yo soy inmigrante y estoy orgullosa de serlo”, dijo la senadora Velma Veloria, una de las viajeros oriunda de las Filipinas. También en el viaje estará María Fuentes, una limpiadora y muy determinada sindicalista afiliada al Local 6 del SEIU. Fuentes fue despedida varias veces por organizar su sindicato con los conserjes inmigrantes en el pueblo cercano Bellevue.

Cientos de miles al sur, en San Francisco, en una ambiente de expectativa feliz, los Viajeros para la Libertad del área y 5.000 partidarios se reunieron en Jardines Yerba Buena donde una cascada rodea las palabras del reverendo Martín Luther King. Un grupo de tambores de indígenas acompañó a los viajeros, marchando hasta el Centro Cívico donde el gobernador Gray Davis, la congresista Bárbara Lee, y Delores Huerta, fundadora del UFW, le dieron la bienvenida.

Navil Ahmad, representando al Consejo sobre Relaciones Islámicas Norteamericanas, va en el Viaje de Libertad para que las familias sean reunificadas, sin importar su condición como inmigrante. Ahmad ha experimentado la discriminación racial en el trabajo, también, él dijo, incluyendo negarle promociones.

Con cantantes religiosos, globos y un gran contingente laboral de sindicalistas, la ciudad de Los Ángeles demostró apoyo total para sus 140 viajeros. El alcalde James Hahn hizo una proclamación declarando el Día de los Viajes para la Libertad para Trabajadores Inmigrantes.

Eliseo Medina, vicepresidente nacional del SEIU, exigió a los inmigrantes envolverse en las elecciones, trabajar contra la destitución del gobernador Gray Davis y por la derrota de Bush en el 2004. El dijo, “Aunque los inmigrantes no puedan votar, ellos pueden llamar a votantes, ir de puerta en puerta para movilizar el voto”.

Grey Pichinte trabaja en dos empleos para poder ganarse la vida. Una limpiadora afiliado al Local 1877 del SEIU, ella le dijo a Nuestro Mundo porqué está cogiendo dos semana de su trabajo y su familia para luchar por los derechos de los trabajadores inmigrantes como ella. “Limpiamos los cuartos de hoteles, trabajamos en restaurantes, soportamos la economía y merecemos justicia”, ella dijo.

Un autobús de Los Ángeles llegará a Dallas el sábado. Los sindicatos de la ciudad orgullosamente van a pagar por los cuartos para que los viajeros pasen la noche, de acuerdo a Jim McCasland, de la AFL-CIO de Dallas, en una rueda de prensa en el Ayuntamiento el 20 de septiembre. En la rueda de prensa, organizada por el concejal Steve Salazar, participaron una amplia gama de grupos de la coalición del norte de Tejas apoyando a la campaña. La monja Nancy Sullivan, hablando por la Diócesis Católica de Dallas, dijo, “Nos mantenemos firme en que los derechos humanos provienen de Dios y la Declaración Universal de Derechos Humanos”. Willy González, organizador para UNITE, invocó el lema tradicional del movimiento laboral, “Una injusticia contra uno, es una injusticia contra todos, no hay excepción”.

Aimee Bolender, presidente de la Alianza de Educadores de Dallas, dijo que los niños inmigrantes “necesitan derechos y libertades para desarrollar todo su potencial”. El doctor Scott Moulton del Concilio de Doctores de Tejas reportó que los inmigrantes sufren de un nivel de accidentes elevado en Tejas. “Muchos mueren en su empleo” él dijo. El grupo Trabajo con Justicia del Norte de Tejas trabajará en oponerse al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas tan fuerte como trabajaron por los Viajes de la Libertad, dijo el activista Gene Lantz.

El 27 de septiembre y los días siguientes, otra ola de autobuses saldrá de Chicago, Minneapolis, Houston, Boston y Miami, con paradas en lugares históricos de la lucha por los Derechos Civiles.

Lucille Whitney, Marc Brodine, Judith LeBlanc, Evelina Alarcón, y Jim Lane contribuyeron a este artículo.