Un reporte recientemente publicado por la AFL-CIO reveló que los trabajadores latinos tienen un 18 por ciento más de probabilidad de fallecer en sus lugares trabajos comparado con todos los trabajadores. En 2013, 817 trabajadores hispanos murieron en sus lugares de trabajo.
El reporte titulado "Muerte en el trabajo: la consecuencia de la negligencia" (Death on the Job: The Toll of Neglect) indica que en 2013, un total de 4,585 trabajadores en EE UU murieron en sus lugares de trabajo debido a lesiones ocurridas mientras laboraban. Adicionalmente, aproximadamente 50,000 trabajadores fallecieron debido a enfermedades ocupacionales. Es decir, casi 150 trabajadores murieron diariamente debido a las peligrosas condiciones laborales.
"Este alarmante índice de muertes en el lugar de trabajo dentro de la comunidad hispana apoya el caso que se necesita que todos los trabajadores tengan una voz más fuerte en sus trabajos", enfatizó Richard Trumka, el presidente de la AFL-CIO. "La inacción de parte de los congresistas para aprobar una vía a la ciudadanía junto con prácticas abusivas de parte de los empleadores, han dejado a millones de trabajadores latinos sumidos en las sombras. Ya es hora de que se escuchen sus voces, y que se fortalezcan sus protecciones, para así asegurar que todos tengan acceso a buenos trabajos que sean seguros".
Según las estadísticas publicadas en el 2013, 817 trabajadores hispanos fallecieron en el trabajo, un incremento significativo del 2012, año cuando fallecieron 748 trabajadores latinos. El estado de California tuvo el número más alto de muertes con 194, seguido por Texas con 192, y Florida con 68. En ese año, casi la mitad de las muertes de trabajadores en California fueron hispanos - un incremento de un 42 por ciento en las muertes de los latinos desde 2012.
Los trabajadores hispanos enfrentan los mayores peligros en las industrias de la construcción y de la jardinería. Mientras 241 latinos murieron en la industria de la construcción en el 2013, la muerte de los latinos que laboran podando y cortando árboles de duplicó comparado con el año anterior. Las muertes de los hispanos en el sector energético del gas y del petróleo también se duplicaron desde el 2010.
Pero quien enfrentan los riesgos más altos de morir en su lugar de trabajo son los trabajadores inmigrantes, desde que en muchas ocasiones son explotados por sus patronos o enfrentan represalias si se quejan de sus condiciones laborales. En 2013, un 66 por ciento de todas las muertes de trabajadores latinos fue de inmigrantes, mientras un 87 por ciento fueron de latinos inmigrantes que laboraban en la industria de la jardinería. Las muertes de los trabajadores latinos en la industria de la construcción se han incrementado en un 19 por ciento desde 2011.
Este informe ha sido publicado durante los últimos 24 años por la AFL-CIO, con información sobre el estado de las protecciones de salud y seguridad en EE UU. El reporte muestra que el índice de mortalidad ocupacional más alto ocurrió en los estados de Dakota del Norte, Wyoming, West Virginia, Alaska y Nueva México.