CARACAS — La apertura del 16mo Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes empezó con un desfile impresionante de más de 15 mil delegados de más de 100 países. La apertura, agosto 8, también incluyó presentaciones culturales. El tema del festival es, “Por la paz y la solidaridad, luchamos contra el imperrialismo y la guerra”.

La gran mayoría de los jóvenes, 11.000, vinieron del hemisferio occidental. Las delegaciones más grande fueron la del país anfitrión Venezuela con 5 mil. A este le siguieron el país vecino Colombia con más de 3.000, Cuba con 1.500, Brasil con 800, y Estados Unidos con una delegación de sobre 700.

Durante la procesión sacaron a Jessica Marshall, copresidenta del Comité Nacional Preparatorio Estadounidense, del desfile y la llevaron a la tarima donde recibió un abrazo del presidente venezolano Hugo Chávez. Este gesto fue visto como un símbolo del gran respeto que él y todos los venezolanos tienen por la delegación estadounidense, cuyo país está tratando de minar la democracia aquí.

Marshall dijo después,”La gente joven de Estados Unidos están de pie en solidaridad con la juventud del mundo, la juventud de Venezuela. Queremos paz y amistad, no la política de agresión de la administración Bush”.

Caracas fue escogido como sede de este festival como un reconocimiento de la Revolución Bolivariana que empezó con la elección de Chávez y los movimientos de masa que lo defendieron contra un golpe en el 2002 que tenía el apoyo del gobierno estadounidense.

La juventud ha jugado un papel importante en el movimiento bolivariano. El Comité Nacional Preparatorio (CNP) de Venezuela está compuesto de 30 organizaciones. El presidente del CNP venezolano es David Velásquez de la Juventud Comunista de Venezuela.

Miguel Madeira, presidente de la Federación Mundial de Juventudes Democrática y el Comité Organizador Internacional (COI), le dijo a Nuestro Mundo, “El festival es el resultado de meses de trabajo colectivo por el COI, que representa cada región del mundo y del CNP venezolano”. Él dijo sentirse satisfecho con el carácter político del festival y que los aconteciminetos políticos venezolanos contribuyen “al refuerzo y rejuvenecimiento de los principios del movimiento de festivales mundiales de la juventud”.



Este movimiento surgió de las cenizas de la Segunda Guerra Mundial y originalmente fue un intento de unir a la juventud del mundo para asegurar que el fascismo nunca regrese. Hoy los festivales representan el poder de la amistad entre los jóvenes del mundo para combatir al reacismo, la guerra, el imperialismo y la pobreza.

Ala media noche, horas después del desfile, Chávez habló a los participantes. Él rindió tributo a los que sufrieron el 11 de septiembre y también habló de las víctimas del bombardeo nuclear por EEUU en Hiroshima y Nagasaki y las víctimas del imperialismo en todo el mundo. El mandatario venezolano también alabó las relaciones actuales entre los pueblos de Cuba y Venezuela.

Chávez notó las inmensas contribuciones hacia el progreso social que hicieron los países socialistas, incluyendo a China, Cuba y la Unión Soviética.

El presidente venezolano también le dio una bienvenida a la delegación de EEUU. Él dijo que estos, “la juventud antiimperialista de Estados Unidos de América” eran huéspedes especiales. Él dijo que los estadounidenses eran “hermanos” de Venezuela y apuntó a las tradiciones progresistas de Walt Whitman y Martín Luther King como ejemplos de un historial radical en EEUU.

Cuando Chávez dijo que un día el pueblo de EEUU se unirán con los pueblos del mundo para salvar al planeta, la multitud le dio una aclamación.