CARACAS, (Tribuna Popular) — El diputado Carolus Wimmer, vicepresidente del Parlamento Latinoamericano, denunció hoy la constante y grave violación de los derechos humanos en Estados Unidos en 2007, en respuesta a los Informes por Países sobre Prácticas de Derechos Humanos en 2007 emitidos por el departamento de Estado estadounidense.
Wimmer, miembro de la Secretaria Internacional del Partido Comunista de Venezuela, hace referencia a un documento dado a conocer por la Oficina de Información del Consejo de Estado, el gabinete de la República Popular China, donde se informa de numerosos casos para demostrar la situación de los derechos humanos en Estados Unidos y las graves violaciones de esos derechos cometidas por EEUU en otros países.
También en 2007 los Estados Unidos, lanzan acusaciones infundadas contra la situación de los derechos humanos en más de 190 países y regiones, incluida China y Venezuela, pero el departamento de Estado eludió referirse a las violaciones de los derechos humanos en su propio país, señala Wimmer, también secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de Venezuela.
La publicación del Registro de los Derechos Humanos en Estados Unidos en 2007 contribuirá a que los pueblos de todo el mundo puedan lograr un mejor entendimiento de la situación real de los derechos humanos en Estados Unidos y urgir a este país reflexionar sobre sus propias cuestiones.
El documento está dividido en siete partes: 1) sobre el derecho a la vida, la propiedad y la seguridad personal; 2) sobre las violaciones de los derechos humanos cometidas por los órganos judiciales y policiales; 3) sobre los derechos civiles y políticos; 4) sobre los derechos económicos, sociales y culturales; 5) sobre la discriminación racial; 6) sobre los derechos de las mujeres y los niños, y 7) sobre las violaciones de los derechos humanos en otros países.
El aumento de la violencia criminal en Estados Unidos supone una grave amenaza para la vida, la propiedad y la seguridad personal de su pueblo.
El Negociado Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos informó en septiembre de 2007 que durante 2006 se produjeron 1,41 millones de delitos violentos en Estados Unidos, cifra que supone un aumento del 1,9 por ciento respecto al año anterior.
Las estadísticas dadas a conocer por el FBI muestran que en 2006, el número de asesinatos y homicidios involuntarios en Estados Unidos se incrementó en un 1,8 por ciento, mientras que el número de robos creció un 7,2 por ciento.
En ese mismo año, los residentes estadounidenses de 12 años de edad o mayores experimentaron 25 millones de delitos violentos y robos.
En Estados Unidos, alrededor de 30.000 personas fallecen por heridas causadas de bala cada año, según informó la agencia noticiosa Reuters el 19 de diciembre de 2007.
En Estados Unidos, los abusos de poder por parte de los departamentos judiciales y policiales han dado lugar a graves violaciones de las libertades y los derechos de sus ciudadanos, dice el documento.
Los casos en los que las autoridades encargadas de la aplicación de la ley vulneraron los derechos civiles de las víctimas aumentaron en un 25 por ciento desde el año fiscal 2001 a 2007 respecto a los siete años anteriores, según estadísticas del departamento de Justicia de Estados Unidos.
Sin embargo, la mayoría de los oficiales encargados de la aplicación de la ley que habían sido acusados de brutalidad policial no fueron finalmente procesados.
Por otra parte, la libertad y los derechos de los ciudadanos han venido viéndose marginalizados en Estados Unidos.
El derecho de los trabajadores a sindicarse ha sido restringido en Estados Unidos. Se informó que el número de miembros de sindicatos disminuyó en 326.000 en 2006, con lo que el porcentaje de empleados afiliados a sindicatos descendió del 20 por ciento en 1983 al 12 por ciento en la actualidad.
Los derechos económicos, sociales y culturales de los ciudadanos estadounidenses no han sido protegidos apropiadamente, añade el documento.
La población pobre en los Estados Unidos se incrementa constantemente. Según estadísticas dadas a conocer por el Buró del Censo de Estados Unidos en agosto de 2007, la tasa oficial de pobreza del país norteamericano en 2006 fue del 12,3 por ciento, lo que suponía que 36,5 millones de personas, ó 7,7 millones de familias vivían en condiciones de pobreza.
El número de las personas hambrientas y sin hogar se ha incrementado de manera significativa en las ciudades estadounidenses. El departamento de Agricultura declaró en un informe presentado el 14 de noviembre de 2007 que 35,52 millones de estadounidenses, incluidos 12,63 millones de niños, sufrieron de hambre en 2006, un incremento de 390.000 respecto al año 2005.
Desde el Parlamento Latinoamericano, Wimmer concluye, “recomendamos al gobierno de Estados Unidos que enfrente sus propios problemas en materia de derechos humanos”.
Mientras EEUU apunta dedo a otros países, sube violaciones de DDHH