Activistas de Vieques y sus partidarios acudieron a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en busca de ayuda internacional para asegurarse que la Marina de Guerra de Estados Unidos cumpla con su promesa de limpiar el ex área de tiro contaminado con tóxicos en esa isla municipio de Puerto Rico.
Dominicos por la Paz y Justicia y Franciscanos Internacional, grupos auspiciado por órdenes de religiosos católicos, presentaron una declaración ante la 60 sesión de la Comisión exigiendo que el organismo internacional, “Coloque en su agenda como un asunto muy serio de derechos humanos el legado tóxico de las actividades [bélicas] en Vieques”. Los dominicos y franciscanos exhortaron, conjunto con grupos como el Comité Pro-Rescate y Desarrollo de Vieques, uno de los grupos en la vanguardia para sacar la Marina de la isla de poco más de 9.000 habitantes, a la Comisión que anime a EEUU recompensar a “las víctimas individuales”, garantizar “la participación ciudadana en la toma de decisiones en los asuntos relativos a la limpieza y el uso futuro de las tierras en Vieques”, descontaminar al área de tiro con un programa de reparación que haga posible el uso sostenible de todas las áreas salvo aquellas irremediablemente contaminadas”, y devolver “todos los terrenos expropiados al pueblo viequense y compense al gobierno de Puerto Rico y a la Municipalidad de Vieques por cualquier área irremediablemente contaminada”.
El documento presentado dice que se necesita la intervención internacional porque dentro “El derecho a la autodeterminación no ha sido implementado respecto a Puerto Rico” y “Como resultado de la relación política entre Puerto Rico y Estados Unidos, las leyes puertorriqueñas de protección del ambiente y los derechos humanos no pueden aplicarse en contra de los Estados Unidos y sus agencias”.
El área de Vieques fue tomado por la Marina hace 60 años para el uso militar y aunque siempre ha habido oposición los bombardeos, la lucha se hizo más aguda cuando una bomba errante cayó cerca de un puesto de observación y mató a un guardia civil hace cinco años. La Marina fue forzada a ceder el área después de unas luchas que envolvió, no solo a los viequenses y puertorriqueños, sino gente en EEUU y otros sitios del mundo.
Vieques ante Comisión DDHH