Miembros de la Comisión por la Verdad y la Justicia hicieron públicos en conferencia de prensa varios documentos desclasificados del Buró Federal de Investigaciones (FBI) que confirman que, en enero de 1976, dos meses antes del asesinato de Santiago Mari Pesquera, el FBI sabía que existía un complot entre miembros del exilio cubano para asesinar al dirigente independentista Juan Mari Brás. En aquel entonces, Mari Brás era candidato a la gobernación por el Partido Socialista Puertorriqueño (PSP). En marzo de ese mismo año, su hijo Santiago Mari Pesquera fue asesinado. Mari Brás y su familia nunca fueron advertidos del complot ni de las amenazas sobre sus vidas.
Como cuestión de hecho, el FBI tuvo conocimiento del complot para asesinar a Mari Brás al menos desde noviembre de 1975, cuando en el documento número 105-2478, fechado a 29 de marzo de 1976 y originado en Miami, Florida, se expresa que, en noviembre de 1975, un agente del FBI dio cuenta de lo siguiente: "Pérez Doreste dijo que Reinol Rodríguez de San Juan, Puerto Rico había estado hablando en el pasado del posible asesinato de Juan Mari Brás, que es secretario general del Partido Socialista Puertorriqueño y que es muy pro [Fidel] Castro, y que Frank Castro autorizó a Rodríguez a trabajar en un plan para matar a Juan Marie Breas [sic]. No hubieron más detalles sobre este posible plan". [Traducido del inglés al español por Mundo Popular].
Dos meses más tarde, en un informe del FBI sobre acciones realizadas por el Frente de Liberación Nacional de Cuba, el documento #105-21892 indica que, en enero de 1976, se enviaron rifles y mirillas telescópicas a Puerto Rico para asesinar al líder del Partido Socialista Puertorriqueño.
Actualmente, Reynol Rodríguez González reside en Miami y es Jefe Militar del grupo paramilitar del exilio cubano, Alpha 66. Frank Eulalio Castro Paz reside en República Dominicana.
"Son muchas las preguntas que nos hacemos a raíz de del hallazgo de estos documentos", dijo Rosa Mari Pesquera, portavoz de la Comisión Por la Verdad y la Justicia. "¿Qué pasó entre enero y marzo de 1976? ¿Por qué en enero se sabía de un complot para asesinar a Mari Brás y dos meses después ejecutaron a su hijo? ¿Quién dio la orden para cambiar de víctima? ¿Qué relación hay entre ambas conspiraciones y qué papel jugó el FBI en cada una de ellas? ¿Por qué Reinol Rodríguez y Frank Castro conspiraban con la anuencia del FBI? ¿Por qué, a casi 34 años, aún no se han encausado a los autores intelectuales de este crimen? Por otro lado, ¿por qué, si el FBI sabía de esa conspiración para asesinar a Mari Brás, nunca se lo hizo saber ni propuso un protocolo de seguridad para el entonces candidato a la gobernación? El hallazgo de estos documentos reitera lo que siempre hemos sostenido: que el FBI sirvió, cuando menos, de encubridor, si no incluso de coautor de este crimen, éste fue un asesinato político con el fin de destruir a Juan Mari Brás, a su familia y al movimiento independentista", indicó Mari Pesquera.
A raíz de que miembros de la Comisión por la Verdad y la Justicia encontraran estos reveladores documentos, el periódico Claridad, representado por su director, Gervasio Morales Rodríguez, hizo una petición oficial al FBI y otras nueve agencias federales para que entreguen toda información y documentos relacionados con ambas conspiraciones y a las personas de Juan Mari Brás, Paquita Pesquera Cantellops y Santiago Mari Pesquera.
"Juan Mari Brás es director fundador, miembro de la Junta Directiva y columnista regular del periódico Claridad", sostuvo Morales Rodríguez, director del Semanario, en conferencia de prensa. "Al saber que existió un complot para asesinarlo, es nuestra responsabilidad periodística, política y humanitaria lograr que se revele toda la verdad, toda la información que durante décadas se ha escondido acerca del daño que hicieron, no sólo a él, a su hijo y a su familia, sino a todo un movimiento de liberación".
Santiago Mari Pesquera fue asesinado el 24 de marzo de 1976, cuando tenía 23 años. Su padre, Juan Mari Brás, era entonces Secretario General y candidato a la gobernación por el Partido Socialista Puertorriqueño. El país vivía un momento histórico en medio del ambiente de persecución y criminalización institucional del independentismo. Mari Brás era una figura prominente del movimiento, y él y su familia habían sido objeto de múltiples amenazas y atentados, incluyendo la colocación de artefactos explosivos en sus residencias y automóviles. Esto, unido al hecho de que en la Policía operaba una banda de agentes corruptos y represores controlados por el FBI, y que el Departamento de Justicia cometió una serie de irregularidades en la investigación y procesamiento del único sospechoso oficial del crimen, dejaron a la familia y al movimiento independentista insatisfechos con el resultado de la pesquisa y el juicio en el cual resultó convicto Henry Walter Coira Story.
Con la excepción de unas traducciones al inglés este artículo fue tomado del semanario puertorriqueño Claridad.