La imposición de un ilegitimo y antidemocrático proceso electoral amañado por los golpistas en Honduras, los llevó a realizarlo a punta de fusil, con manifestaciones de la resistencia reprimidas y se informa de varios dirigentes detenidos y hasta ahora desaparecidos.
Fuerzas populares hondureñas decidieron hacer un boicot de las elecciones debido a que no hubo tiempo para hacer campaña bajo el régimen golpista y por qué, a pesar de negociaciones para un gobierno de unidad nacional encabezado por el presidente legítimo, José Manuel Zelaya, el gobierno golpista decidió que sería el presidente de facto, Roberto Micheletti quien dirigirá tal gobierno.
A pesar que las autoridades electorales dictatoriales intentan dar a conocer un proceso masivo, lo que las televisoras mostraron fue lo contrario, lo que obligó al ente a prorrogar el plazo de cierre de las urnas.
No hay duda que la lucha contra el Golpe de Estado fue la que ganó en esta jornada, ya que no se podrá ocultar la militarización de todo el país, para intentar aplacar las protestas populares, donde si hubo gente, en contra de los locales de votación casi vacíos, con excepción de las zonas oligarcas del país.
El llamado al "Toque de Queda" hecho por el Frente de la Resistencia contra el Golpe de Estado, fue acatado mayoritariamente en el país, aunque no se pudo evitar que manifestantes salieran a la calle, para rechazar la falsa derechista que fueron fuertemente reprimidos.
Estados Unidos, Costa Rica, Panamá y Perú, han anunciado que si reconocerán la falsa electoral, el resto de los gobiernos del mundo han manifestado que no serán reconocidos.
Se reportó que efectivos del Ejército y de la policía de Honduras reprimieron el domingo a manifestantes de la resistencia que de forma pacífica marchaban en San Pedro Sula como medida de protesta contra el proceso electoral que se desarrolla en la nación convocado por las autoridades de facto.
En contacto telefónico con TeleSUR la periodista hondureña Daisy Bonilla reportó que las fuerzas militares usan bombas lacrimógenas y palos para arremeter contra la marcha que ha insistido en su carácter pacífico.
"Se está viviendo un caos... las represiones provienen de la fuerza militar y policial, es un clima de intolerancia estamos prácticamente militarizados, los policías están con palos y con armas de reglamento, acordonan el centro y revisan a la gente que pasa por el lugar", reportó Bonilla.
Así mismo, la periodista informó que miembros del Ejército acordonaron los centros de votación "revisan vehículos, interrogan a las personas, si es como observador internacional, si es como votantes y si son votantes les revisan los documentos de identidad", dijo a TeleSUR.