Muchos de los que votaron a favor de Barack Obama para la presidencia de Estados Unidos pensaron que tendríamos una política nueva hacia Cuba, el bloqueo y el derecho de gente bajo jurisdicción estadounidense viajar libremente a ese país socialista de Latinoamérica.

Cuando la administración de Obama revocó  las reglas del gobierno de George Bush que restringía los derechos de los cubanos a visitar sus parientes en Cuba, se pensó que la vieja política antidemocrática estaba en camino a ser revocada. Bush prohibió a los cubanos (que casi todos votaron por él) ir a Cuba a ver familiares como primos, tíos y tías; gastar dinero en Cuba que antes podían, incluso para otorgárselos a sus familias; y limitar a cada tres años los viajes que antes se podían hacer anual.

No obstante, cuando el cantautor cubano Silvio Rodríguez no recibió una visa para venir a EEUU al homenaje a Pete Seeger, músico folclorista y de música de protesta y justicia social, en su 90 cumpleaños, se seguía la misma política del imperialismo que pretende aislar a Cuba para destruir su revolución socialista - una política de medio siglo que no ha tenido ningún éxito.

Por esto es que estas dos noticias nos agradan muchísimo: La del concierto el pasado fin de semana en La Habana y la noticia de que unos músicos cubanos viajarán a Estados Unidos y a Puerto Rico (que bajo control estadounidense no puede decidir por si mismo otorgar permisos a ciudadanos cubanos) para conciertos.

Juanes, cantante colombiano que vive en Miami, organizó el "Concierto Paz sin Fronteras" en La Habana. A él se unió los artistas de Puerto Rico Olga Tañón y Danny Rivera, el español Miguel Bosé y varios cantantes y bandas cubanas. El concierto fue organizado para coincidir con el Día Internacional de la Paz auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas. (Por lo que entiendo, Juanes ya está planeando otro concierto igual para el año que viene en Tijuana en la frontera con EEUU - esto puede ser muy interesante dado la cuestión de inmigración y la necesidad de una reforma integral).

Los otros dos conciertos bajo jurisdicción estadounidense serán de Pablo Milanés, cantautor de la nueva canción, que catará en concierto en Puerto Rico y Zenaida Romeu que conducirá  la Orquesta Sinfónica Fargo-Moorhead en Fargo, Dakota del Norte. Romeu es una famosa compositora y conductora de la Camerata Romeu, una orquesta de cámara compuesta totalmente por músicas femeninas.

Bernard Rubenstein, director de la Orquesta Sinfónica Fargo-Moorehead, dijo que desea que "esto sea solo el principio de un aumento en el intercambio cultural entre nuestros dos países, y que todas las barreras a la cultura y viajes pronto serán totalmente eliminadas".

Ojalá Rubenstein tenga razón. Recordemos que 1.300 ciudadanos estadounidenses envueltos en las artes y actividades culturarles firmaron una carta al presidente Barack Obama exigiendo relaciones culturales entre EEUU y Cuba.

Pero, claro está que sectores recalcitrantes de la derecha cubana exiliada en el sur de Florida buscan seguir con la política fracasada del bloqueo. (Notamos bien que con esto no quiero decir que necesitamos una nueva política en contra de la Revolución Cubana y su socialismo, un sistema social-económico que apoyo).

Como se reportó, estos sectores rompieron los discos de Juanes en Miami y algunos hasta lo amenazaron con la muerte, igualmente recibió amenazas Tañón.

Este grupúsculo, en términos de la población total del país (representa menos de 1,5 por ciento de la población y no todos son derecha ni adultos), quiere gobernar, quiere decidir lo qué el resto de la población puede oír y donde los artistas pueden presentarse. La realidad es que ambos Juanes y Olga Tañón tienen una base de fanáticos mucho más allá de Miami que tendrá poco impacto sobre el futuro de ambos artistas.

Este boicot puede ser un cuchillo de doble filo. Recordemos que cuando la salsera cubana radicada en Miami, Celia Cruz, aprobó el boicot de Miami contra el salsero puertorriqueño Andy Montañez (cancelaron la presentación de Montañez en el Festival de la Calle Ocho en Miami) por haber saludado al cantautor cubano Silvio Rodríguez cuando este se presentó en Puerto Rico, el concierto de Cruz en Puerto Rico tuvo que ser cancelado por el boicot de los medios y el pueblo puertorriqueño.

No obstante, ojala esta apertura cultural entre Cuba y EEUU pueda dirigirnos a tener relaciones normales con Cuba como los tienen todos los otros países del hemisferio occidental. 

Foto de Olga Tañón por Franklin Reyes/Prensa Asociada.