Tropas norteamericanas mataron a 15 iraquíes, incluyendo por lo menos a seis niños, e hirieron a 75 más mientras tomaban parte en una manifestación cerca de Bagdad el 29 de abril. El próximo día mataron a dos civiles más e hirieron a otro 14 en una marcha de mil personas que protestaba contra la primera matanza. A pesar de que oficiales norteamericanos dicen que dispararon en defensa propia, testigos dicen que no había ningún peligro para los militares.

Residentes de la ciudad le echaron la culpa a los militares norteamericanos por una explosión en un depósito de armas que mató por lo menos a 12.

Casi todos los días se hacen protestas en Bagdad y otras ciudades iraquíes contra la ocupación militar norteamericana.

Grupos humanitarios acusan a Estados Unidos y Bretaña de no proteger a los civiles de las miles de bombas que dejaron caer sobre Irak. Particularmente los niños están sufriendo por las bombas que ellos encuentran y explotan en sus manos.

Una reunión que casi no se reportó en los medios de comunicación controlados por las corporaciones fue la de un amplio grupo de organizaciones iraquíes en Madrid el 27 de abril. Esta reunión, la primera desde que terminó el régimen de Saddam Hussein, incluye a organizaciones que están boicoteando los esfuerzos de EEUU formar un gobierno interino. En esta reunión, que incluía gente importante conocidas y organizaciones incluyendo las principales organizaciones de musulmanes chiítas, kurdos, monárquicos constitucionales, y el Partido Comunista Iraquí, hicieron un acuerdo de trabajar hacia una democracia pluralista federal con una constitución garantizando derechos básicos sin i,portar a religión o sexo.

Asistiendo a la conferencia de Madrid estaban más de 100 iraquíes de 11 grupos políticos, escritores, cineastas e intelectuales. Hubo una amplio acuerdo entre los asistentes que la reconstrucción de Irak debe envolver a la comunidad internacional y ser dirigido por los iraquíes y no EEUU. Un integrante de Concilio Supremo para la Revolución Islámica en Irak dijo, “Es importante formar un gobierno iraquí en vez de una administración iraquí bajo el general Jay Garner”.

Contrario a la impresión dada en los medios de comunicación estadounidense, los chiítas iraquíes, quienes constituyen el 60 por ciento de la población de Irak, representan una amplia gama de puntos de vista. “Los chiítas no son todos lo mismo”, dijo un representante del Congreso Nacional Iraquí que está respaldado por EEUU. “Algunos son moderados, otros son liberales, la mayoría del Partido Comunista son chiítas. No todos los chiítas son religiosos”.

La conferencia de Madrid discutió un marco para darle representación política a la mayoría chiíta de Irak y autonomía para el pueblo kurdo. También abogó en favor de enjuiciar a Saddam Hussein por crímenes contra la humanidad.

En la apertura el primer ministro español José Aznar dijo que “la riqueza étnica y religiosa [de Irak] no deber ser un pretexto para un tercer país ejercer una influencia no debida”. Aznar apoyó a la guerra norteamericana contra Irak a pesar de que 90 por ciento de los españoles se oponían. Un día después de esta conferencia en otra, auspiciada por EEUU en Bagdad, se vieron grandes diferencias entre los delegados sobre como formar un nuevo gobierno.

Sin embargo, la administración Bush está corriendo para formar un gobierno interino sumiso que tomará control de las ventas del petróleo y quitárselo del programa Alimento por Petróleo de la Organización de las Naciones Unidas. El dinero de la venta de petróleo entonces se pondrá en una cuenta del Banco Central Iraquí, encabezado por un norteamericano, bajo la supervisión del Banco Mundial y el Fondo Internacional Monetario. Están poniendo un equipo, encabezado por Phillip Carroll, ex jefe de la corporación Shell, para administrar la industria petrolera.

“La idea es crear una situación actual lo más rápido posible para mejorar nuestro poder de negociar”, dijo un oficial estadounidense.

La Casa Blanca escogió a Dan Amstutz, un ex oficial de la administración de Ronald Reagan y alto oficia de la corporación Cargill, la exportadora más grande de granos en el mundo, para dirigir la reconstrucción agrícola de Irak. Kevin Watkins, director de política de Oxfam, una organización internacional de auxilio, atacó el nombramiento diciendo que era un ejemplo de la comercialización norteamericana de la reconstrucción de Irak. Él dijo que Amstutz “llegará con una maleta llena de retórica en favor de un mercado abierto” y probablemente tratará de deshacerse de granos baratos norteamericano en un mercado lucrativo iraquí en vez de estimular al país reconstruir su sector agrario que una vez tuvo mucho éxito. Watkins dijo que “Poner a Dan Amstutz encargado de la reconstrucción agraria es como poner a Saddam Hussein como presidente de la comisión de derechos humanos. Este tipo está bien situado para avanzar los intereses comerciales de las compañías norteamericanas de granos ... y no para dirigir un programa de reconstrucción de un país en desarrollo”. Oxfam y otras organizaciones humanitarias dicen que la reconstrucción debe de estar en las manos de la ONU.

Pero la administración Bush está buscando una resolución en el Consejo de Seguridad que minimizaría el papel de la ONU en la reconstrucción a uno de consulta. Se espera que Rusia y Francia se opongan a la propuesta de EEUU sobre el papel central de la ONU.

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