Murdoch tuvo que admitir dibujo era racista

Rupert Murdoch, el australiano rico dueño del diario neoyorquino New York Post, admitió que un dibujo que apareció en el periódico era racista. Murdoch, que es muy conservador, escribió en su diario diciendo que quería “pedir disculpa personalmente a cualquier lector que se sintiera ofendido, o hasta insultado” por el dibujo y que publicarlo era “un error”.

El dibujo mostraba a dos policías acabando de matar a un chimpanzé. Uno le dice al otro, “Tendrán que encontrar a alguien más para escribir el próximo proyecto de ley de estímulo económico”. Barack Obama había firmado el estímulo económico el día anterior.

Aunque el dibujante usó el hecho de que un simio había atacado a una mujer en Connecticut y lo tuvieron que matar, activistas afronorteamericano y otros se sintieron ofendido diciendo que estaban comparando a Obama con un mono, cosa que ha pasado tiempo tras tiempo con los racistas.

El conocido activista, el reverendo Al Sharpton, organizó manifestaciones reclamando una disculpa. Unos días después en editorial el New York Post publica sus “disculpas”.

El editorial dice que el dibujo “fue tomado como otra cosa, como si fuese el presidente Obama, como una expresión no muy oculta de racismo”. Sigue el editorial, “a esos que se sintieron ofendido por la imagen, pedimos disculpas”.

Pero deciden no dejarlo ahí y critican a Sharpton porque el ministro ha criticado a la posiciones políticas de derecha del periódico antes. “No obstante”, concluye el editorial, “hay algunos en los medios y en la vida pública que han tenido diferencias con el Post – y ellos ven esto como una oportunidad para pagarnos para atrás. A esos no le pedimos disculpas”.

El editorial fue causa de más protestas.

La sección de Nueva York de la Liga de Ciudadanos Unidos Latino Americanos (LULAC) criticó el dibujo y la “disculpa” en una declaración. LULAC llamó el dibujo denigrante. “Es incomprensible como la administración del New York Post permite que se publique y distribuya este dibujo al público en general. Claramente, es indiscutible que este dibujo se puede interpretar por la mayoría como un ataque deplorable contra un líder mundial que ha claramente animado la admiración y respeto”.

Sigue el comunicado diciendo que vez como problemático la “naturaleza violenta” del dibujo que puede “potencialmente tener un efecto negativo sobre la mente de un racista inestable queriendo intentar un asesinato”.

LULAC también criticó el editorial diciendo que era obvio que los jefes del diario no sentía que habían hecho nada mal. “El ataque en contra del reverendo dice mucho y debe verse por lo que es: un intento desesperado de desviar la crítica pública legítima...” y llamó por rechazar la “disculpa”.

Notando que no siempre están de acuerdo con Sharpton, la declaración dice, “en este caso, los miembros de la Sección de Nueva York de LULAC apoyan el punto de vista del reverendo. Cualquiera con solo una onza de sentido común... pueden ver que este dibujo no es nada más que una muestra de humor enfermo que es peligrosa, [y] ofensiva...”