Sindicalistas estadounidense visitan Irak

CHICAGO – Dos sindicalistas estadounidense acabaron de regresar de Irak y dicen que tienen la esperanza de que su viaje es el empezar de la cooperación y la solidaridad entre el movimiento laboral de Estados Unidos y los sindicatos iraquíes recién establecidos de nuevo. Clarence Thomas, miembro de la junta ejecutiva del Local 10 del Sindicato Internacional de los Muelles y Almacenes, en el área de San Francisco, y el periodista laboral David Bacon pasaron cinco días en Irak ocupada por EEUU.

En una entrevista durante una asamblea nacional por la paz celebrada aquí por Labor EEUU Contra la Guerra, cada uno de los dos le dijeron a Nuestro Mundo que fue “inspirado” por el valor y la vitalidad de los trabajadores iraquíes que audazmente están formando uniones laborales de nuevo y luchando por los derechos de los trabajadores y contra la privatización norteamericana bajo condiciones muy difíciles.

La taza de desempleo en Irak es de como 70 por ciento, pero hay seguro de desempleo. Los iraquíes que están trabajando están peor ahora de lo que estaban antes, dijo Thomas. Las autoridades de ocupación han congelado los sueldos a $60 el mes, menos de lo que los trabajadores antes ganaban, y los trabajadores ya no reciben los subsidios para alimentos y viviendas que antes fueron otorgado por el gobierno de Saddam Hussein.

Thomas y Bacon visitaron una refinería de petróleo donde los obreros trabajan turnos de 11 a 13 horas. Los obreros recibían parte de las ganancias de esta empresa estatal, pero ese no es el caso hoy en día. “Las cosas están tan mala que le dan aceite de motor – tienen niños vendiendo el aceite en las calles – como suplemento a sus ingresos”, dijo Thomas. Los trabajadores le dijeron a los visitantes que no tienen equipo de seguridad, ni guantes, y hay un solo casco en la planta entera de energía. En la industria petrolera de propiedad pública, como en los otras del sector público, los empleos son garantizados. Pero un administrador de la refinería le dijo a los visitantes norteamericanos que si la empresa es privatizada, él será forzado a dar de baja a la mitad de los trabajadores.

Organizar sindicatos y huelgas es ilegal en Irak hoy en día, bajo una ley de Saddam Hussein del 1987, que la “Autoridad Provisional de la Coalicion” – las autoridades de la ocupación – rehusan revocar. “Esto es un ejemplo de lo que la administración Bush está planeando para Irak”, dijo Thomas. “Ellos se deshacieron ron del régimen, pero todavía mantienen sus leyes”. Esto muestra que las autoridades norteamericanas no están interesados en la democracia para el pueblo iraquí, él dijo, sino están principalmente interesados en “hacer a Irak lista para la privatización”, para el beneficio de las corporaciones estadounidenses. Bacon comentó, “Ellos no quieren uniones en estas fábricas cuando llegue la privatización, porque no quiere que la gente resista”.

Sin embargo, los trabajadores han estado organizando y ejerciendo la democracia, a pesar de los intentos por las autoridades negársela, declaró Thomas. Los sindicalistas norteamericanos visitaron una fábrica de cuero, con muchas trabajadoras, y oyeron como estas obreras habían marchado al ministerio para protestar contra la paga baja y las condiciones de trabajo. Como cualquier organización sindical, “la gente están tratando que las autoridades las reconozcan y las autoridades no quieren reconocerlas”, él dijo.

Thomas dijo, “Fui muy inspirado, porque esta gente no están aceptando esto sin hacer nada, el pueblo no es dócil en nada”.

Bacon señaló que, cuando el Congreso pasó los $87 mil millones para la ocupación, “ni una persona se levantó y preguntó si alguna parte de esto era para un sistema de beneficios por desempleo”, ni preguntó cuanto son los sueldos iraquíes ni si necesitaban un aumento. “La gente común en Irak no existe para ellos – ellos son invisible”. Para poner fin con la ocupación, él dijo, “tenemos que hacer esta gente visible, que tengan una voz”.

En declaraciones ante la conferencia de Labor EEUU Contra la Guerra, Thomas y Bacon dijo que los sindicalistas iraquíes están luchando contra un apoderamiento por las corporaciones de EEUU. Los trabajadores con los cuales ellos se reunieron quieren que la comunidad internacional intensifique los esfuerzos para terminar con la ocupación por EEUU, y por la implementación en Irak de los acuerdos básicos de la Organización Internacional del Trabajo que afirman los derechos laborales de organizar e irse a la huelga. Ellos le pidieron al movimiento laboral estadounidense que presione para que hagan vistas públicas en el Congreso sobre como la autoridades de ocupación le niega los derechos a los trabajadores iraquíes. Las violaciones de derechos laborales en Irak está conectado a las violaciones de derechos laborales aquí, ellos dijeron.