Tegucigalpa (PL) — El Movimiento Campesino Hondureño Organizado exigió al Gobierno una solución inmediata al conflicto agrario en la comunidad El Tumbador, bajo Aguán, donde fueron masacrados cinco trabajadores rurales a manos de sicarios de la oligarquía rural.
En un comunicado, la agrupación recordó el asesinato el pasado 15 de noviembre de Teodoro Acosta, Raúl Castillo, Ignacio Reyes, Siriaco de Jesús Muñoz y José Luis Sauceda, quienes mantenían un conflicto por el reparto de tierras con terratenientes del lugar.
Según una fuente vinculada al Instituto Nacional Agrario (INA), unos 200 hombres armados, obedeciendo órdenes del empresario Miguel Facussé, atacaron a las víctimas con armas de grueso calibre y en el incidente desaparecieron dos campesinos y otros cuatro fueron heridos.
Al respecto, el movimiento reclamó a la Procuraduría General de la República que haga prevalecer la validez de las escrituras donde consta el traspaso de esas tierras al INA con vistas a una Reforma Agraria.
Asimismo, pidieron una investigación a fondo de los asesinatos de campesinos en Bajo Aguán (17 en lo que va de año) y que se castigue a los responsables materiales e intelectuales de esos hechos.
En el texto, los trabajadores del campo hondureño rechazaron, además, la manipulación mediática en torno a los referidos sucesos y la actitud de la policía y el Ejército, que permiten el derramamiento de sangre en los enfrentamientos de sicarios armados contra los campesinos.
El comunicado fue firmado por la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), la Asociación Nacional de Campesinos Hondureños (Anach), y la Asociación Campesina Nacional (ACAN).
Foto: Los agricultores de protesta en Honduras en Tegucigalpa. Kent Gilbert / AP