Moscú (PL) El verano más caluroso en un milenio en Rusia puede dejar pérdidas por 15 mil millones de dólares, equivalentes al uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), destaca hoy la prensa local.
De acuerdo con expertos citados por el diario Kommersant, los cálculos corresponden sólo a las pérdidas directas y de efecto inmediato de la sequía y los incendios forestales, provocados por altas temperaturas por encima de los 30 grados Celsius (86 Fahrenheit) desde junio último.
La escasez de lluvias y las inusuales temperaturas obstaculizan la siembra de trigo para la recogida del año próximo, reconoció la víspera el primer ministro ruso, Vladimir Putin.
Expertos de la firma HSBC consideran que se perderán unos tres mil millones de dólares por la suspensión de las exportaciones de trigo ruso hasta diciembre próximo, aunque Putin aclaró que la fecha tope para esa medida se decidirá una vez terminada la cosecha de 2010.
Además, el rotativo señala que sólo para inundar los campos de turba en la región de Moscú, causantes de permanentes incendios por el calor, se necesitarán unos 22 mil millones de rublos (unos 738 millones de dólares) en los próximos tres años.
La producción industrial en el tercer trimestre de este año también puede verse afectada seriamente, en medios de los esfuerzos del país por dejar atrás los efectos de la crisis global.
Por su lado, la ministra de Salud y Desarrollo Social, Tatiana Galikova, indicó que el 80,1 por ciento de los afectados ya recibió 10 mil rublos (poco más de 300 dólares) para gastos de primera necesidad.
Asimismo, al 80 por ciento de los damnificados se le entregó la compensación de 100 mil rublos del presupuesto federal.
Hasta el momento, mil 247 familias decidieron esperar por las construcción de sus casas por parte del estado, mientras 93 deberán comprar viviendas del fondo habitacional en el país.
Por otro lado, el ministerio de Situaciones de Emergencia anunció que se lograron controlar los incendios en 11 de las 14 regiones afectadas por las llamas. Aunque quedan pendiente los casos de la región de Moscú, Nizhninovgorod y Riazan.
Los especialistas prevén que las temperaturas continuarán por encima de los 32 grados Celsius (90 Fahrenheit) hasta finales de la semana próxima y las lluvias sólo se verán el fin de semana.